Esta semana vengo con una noticia importante para todos aquellos que disfrutamos de la fotografía y que estamos interesados en las nuevas tecnologías. La casa Nikon ha decidido no vender partes sueltas de sus productos a los centros no autorizados por la compañía, una acción que bien puede pretender aumentar la calidad de sus centros de reparación o bien puede ser una medida para cerrar el mercado, eliminar competencia y aumentar ventas.
A simple vista, este no es un acto tan agresivo ni preocupante, sin embargo, encontramos un trasfondo muy negro en todo este asunto. El ejemplo lo tenemos en países como Estados Unidos, donde tan solo hay 22 centros autorizados, haciéndose imposible una reparación rápida, obligando al usuario a enviar el producto por correo, con todos los gastos e inconvenientes (retrasos, golpes, pérdidas) que esto supone.
Si recordáis el comienzo del post pensaréis ¿Y qué tienen que ver las nuevas tecnologías en esta decisión? Señores, esto es (en mi opinión) un paso más hacia la obsolescencia programada, ese término que parece estar más presente en nuestras vidas de lo que desearíamos. Y me explico: Acabando con este mercado de reparaciones Nikon pretende que el usuario se plantee sustituir su equipo antes que repararlo.
Un ejemplo de este tipo de casos lo encontramos el conocido blog de reparaciones ifixit, donde se expone la situación de un fotógrafo cuyo trabajo depende de su cámara, impidiéndole reparar esta por el tiempo que supondría.
Parece que no somos los únicos que vemos esta situación un tanto extraña y que pensamos que lo que ha dicho Nikon no es más que una máscara para aumentar sus ventas. Ante esta situación habrá que buscar soluciones contando como una de ellas que Nikon concediera a más centros el estatus de centros autorizados. Ahora nos queda ver cómo reacciona el consumidor y esperar que esta medida no llegue a España, ya que actualmente afecta solo a Estados Unidos.
Se me hace especialmente importante en este post que comentéis vuestras opiniones y qué soluciones ofreceríais vosotros ante esta situación. Pensad que si dejamos que las grandes empresas campen a sus anchas los primeros perjudicados seremos nosotros los ciudadanos de a pie.
La verdad, no tengo claro qué pensar. Por un lado veo lógico que no se suministren piezas a tiendas no autorizadas por la compañía, ya que de esta forma aseguran calidad en las reparaciones. Sin embargo, quizá tienes razón en el tema de la obsolescencia, pero no lo tengo claro 🙂
Por supuesto que se aseguran la calidad de reparaciones, pero no creo que este sea el camino…
Esperemos que se hagan más centros especializados para paliar esta medida igualmente, sería una buena solución.
Obsolescencia… y es lo que pretenden. Veo bien que exista un mercado aparte de las cadenas oficiales de reparación. Que le den la libertad al usuario de decidir donde quiere acudir a reparar su producto, pero no que impongan algo determinado…
La solucion?pues…que tal si todos dejamos de comprar Nikon? Ya veras lo prontito que dan marcha atras…
El servicio de reparacion de Nikon es una pesadilla,envie mi camara por problemas del fabricante mas $12.00 dolares costo de envio y una carta indicando que en 5 semanas me iba de viaje…..pasaron las 5 semanas y la camara No llego,la razon…alegan que la pieza viene de Japon….Decepcionada con Nikon