Todos conocemos el programa de retoque fotográfico con más magia (según los que saben de él y no lo manejan) que existe y conocemos su enorme potencial. Ya sea para que una estupenda modelo parezca tener una piel de porcelana o para borrar algo de la imagen, Photoshop es el rey del retoque. Podemos hacer que una imagen cambie por completo o crear desde la nada todo un mundo nuevo. Sin duda, es una herramienta estupenda para ser creativos. Por eso hoy nos vamos a lanzar a darle un toque especial a la fotografía de esta semana.
No obstante, no debemos olvidar que este programa no es como una barita mágica que todo lo hace realidad. Al principio puede parecer que resolver cualquier cosa es imposible, pero la práctica nos enseña a ir aprovechando mejor sus herramientas. Hoy veremos alguna, pero principalmente os quiero mostrar algo fundamental e indispensable para mí, las capas de ajustes. Cuando los que nos dedicamos a la fotografía hablamos de un retoque “no destructivo”, hacemos referencia al uso de estas que nos permiten realizar diferentes ajustes sin modificar el original con el que comenzamos el proyecto.
Las capas de ajuste se encuentran en la parte inferior del panel de capas, y tenemos multitud de ajustes con los que jugar y la mejor manera de conocerlos es experimentar con ellos. En esta imagen he utilizado mis ajustes preferidos:
– Las curvas – Intensidad – Niveles
Podéis ver como ha sido el proceso de edición de esta imagen en el siguiente vídeo en el que os voy explicando el funcionamiento de las capas de ajustes.
En este caso hemos dado un toque más especial a una imagen realizada a toda prisa y sin mucho carácter. Así que no dudéis en reutilizar vuestras fotografías y pasaros por Photoshop en busca de resultados singulares. Y como siempre os invito a compartir con nosotros vuestras fotografías con #CapasdeAjusteCreativas en las redes sociales, estamos en Google+, Facebook o Twitter.