Jack London fue uno de los escritores norteamericanos de más éxito en el inicio del siglo XX. En sus más de cincuenta libros se nos desvela un escritor con un impresionante realismo en su estilo.
Es conveniente conocer que la gran mayoría de sus relatos no son producto de su imaginación creadora, sino de las vivencias del propio Jack London a lo largo de una juventud llena de viajes y aventuras. No se trata de narraciones autobiográficas, sino de auténticos relatos o novelas donde la fantasía y creatividad del autor transforma en palabras hechos y personajes insólitos, sorprendentes y singulares basándose en su propia experiencia vital, en sucesos que vivió o conoció a través de otros y en personajes a los que trató o de los que alguna vez oyó hablar.
Empezó a escribir hacia 1900 y murió apenas 16 años después, dejando una obra que sigue leyéndose en todo el mundo con títulos tan recordados como Colmillo Blanco, La llamada de lo salvaje, El vagabundo de las estrellas, etc. Además de sus narraciones de acción y aventura escribió dos novelas de inspiración filosófica: Antes de Adán y La peste escarlata, así como una buena cantidad de relatos cortos.
La ley de la vida es un majestuoso relato para el que London se inspiró en la costumbre de ciertas tribus de nativos americanos de la región de Yukón (situada entre Alaska y Canadá) consistente en abandonar a los ancianos con una pila de leña junto a una hoguera con el fin de no perjudicar a la tribu en sus desplazamientos cuando cambian de lugar el campamento. Con un estilo sumamente crudo y realista, London narra la agonía de Koskoosh, jefe de la tribu abandonado por su familia según dicta la tradición.
El anciano recuerda una imagen premonitoria de su niñez: una jauría de lobos atacando a un viejo alce rezagado de su rebaño. Sabe que ese es también su destino, y que los lobos acabarán con él en cuanto la hoguera se apague.
Hay cierto punto de resignación e indolencia en la forma de pensar y actuar del viejo jefe que no deja de ser desasosegante para el lector, haciéndole plantearse cuestiones como la supervivencia, la muerte o la crueldad del destino que todos compartiremos.
El final de cuento, por intuido o adivinado, no deja de estar impregnado de una maravillosa poesía, una especie de regalo final del autor capaz de hacernos recordar esta historia por mucho tiempo.
Gran (aunque breve) escritor. El relato es de una tristeza infinita, lo cuál no quita que lo de abandonar los lastres sea algo muy útil y funcional…
Breve en tiempo, aunque no en obras. Si revisas su biografía encontrarás que escribió alrededor de 50 libros, que ya me gustaría a mí…
Muy apropiado para acompañas las noticias http://www.elpais.com/articulo/sociedad/ley/muerte/digna/consagra/derecho/morir/habitacion/individual/elpepusoc/20110513elpepusoc_1/Tes 🙂
Hola, quizás os interese saber que tenemos una colección que incluye el relato ‘A Piece of Steak’ de Jack London en versión original conjuntamente con el relato ‘Sonny’s Blues’ de James Baldwin.
El formato de esta colección es innovador porque permite leer directamente la obra en inglés sin necesidad de usar el diccionario al integrarse un glosario en cada página.
Tenéis más info de este relato y de la colección Read&Listen en http://bit.ly/pcAVla