En una keynote en la que no hubo novedades importantes, y en la que se presentó un iPhone 4S en absoluto revolucionario (quizá Siri sea lo único destacable), resultaba poco realista tener la expectativa de que los iPod fueran a recibir grandes cambios. Cada vez este segmento es menos importante para Apple, y la prueba de ello la tenemos en que prácticamente no se han realizado modificaciones sobre la gama actual.
El iPod touch se limita a recibir un modelo en color blanco, y aumentar su capacidad máxima hasta los 64GB. Los de Cupertino insisten en su éxito como videoconsola portátil, pero no han decidido potenciarlo con una actualización de hardware. A partir del 12 de octubre lo podemos tener en las manos, por 189 euros el iPod de 8 GB, 289 euros el de 32 GB y 389 euros la nueva versión de 64 GB de capacidad. Por supuesto, el producto se revaloriza por el lado del software gracias al nuevo iOS 5 e iCloud.
Respecto al iPod nano, la interfaz ahora se parece más a Cover Flow y menos a la pantalla principal de un dispositivo iOS. Se incluyen nuevos skins para la función de reloj, dado que los accesorios que permiten llevar el reproductor con nosotros en la muñeca se han vuelto muy populares. Además, lleva integrado un podómetro para que nos acompañe a la hora de hacer ejercicio, de forma que podamos controlar la distancia recorrida. Está disponible a partir de hoy mismo en diversos colores, por 129 euros el modelo de 8 GB y 149 euros el de 16 GB.
Resulta un poco decepcionante que el iPod touch no haya sido renovado, pero no es difícil imaginar que a lo largo del próximo año incorporará muchas de las novedades del iPhone 4S. En lo referente al iPod nano, ya no es un producto que vaya a levantar pasiones, pero las pequeñas modificaciones que ha disfrutado me parecen acertadas y, realmente, no tendría sentido una apuesta fuerte por este reproductor en plena era de los smartphones. ¿Qué opinas tú de estos dispositivos? ¿Te animarán estas actualizaciones a hacerte con un iPod en breve?
