Hace ya un par de meses solicité una invitación para acceder a Voddler.com. El sábado pude comprobar cómo mis plegarias habían sido atendidas y tenía por fin acceso a la plataforma.
Para todos aquellos que no conozcan Voddler se lo describiré de una manera sencilla: es como un Spotify de series y películas.
Tratando de emular los pasos de Netflix al otro lado del Atlántico, Voddler persigue algo que hace unos pocos años parecía impensable: pagar por ver cine online.
Hemos de recordar que hace unos 3 ó 4 años (casi una eternidad en tiempo de internet), la red se llenó de sitios que demostraron que era posible el streaming de vídeo aplicado a películas completas y con un alto número de usuarios, y como todo lo que es posible se acaba llevando a la práctica, el videoclub online (esta vez legal y pagando derechos de autor) es una realidad.
Mis primeras impresiones acerca de la plataforma son dispares: por un lado la calidad de imagen y sonido es relativamente buena, los tiempos de carga no son excesivos con una conexión media (10 megas) y el sistema de búsqueda está bastante afinado. Lo que sigue rechinándome es el precio de ver la películas sin publicidad (2,49 euros) que me sigue pareciendo excesivo para una película en streaming.
Voddler ofrece dos posibilidades: ver la película pagando (en cuyo caso no tendrá publicidad) o verla gratis (con los consecuentes anuncios intercalados). La intención de la plataforma es ofrecer el 80% de sus contenidos gratis (financiándose mediante anuncios) y el 20% restante en modo de sólo pago.
Actualmente el catálogo en España es bastante reducido (queremos creer que por encontrarse todavía en sus primeras etapas de comercialización en el país) y creemos que la popularización de este servicio vendrá de la mano de tres factores fundamentales: precio de los contenidos de pago, número de anuncios intercalados en el caso de los contenidos gratuitos y profundidad del catálogo.
Si Voddler consigue “afinar” esos tres factores dentro de márgenes razonables tiene el éxito asegurado.
