En 1977, la NASA lanzó desde su estación espacial ubicada en Cabo Cañaveral dos sondas, concretamente la Voyager-2 (20 de agosto) y la Voyager-1 (5 de septiembre). ¿Su tarea? Explorar el espacio recogiendo datos científicos que serían enviados de vuelta a la Tierra y actuar como nuestros posibles embajadores en caso de contacto con alguna civilización alienígena. Como veis, lo de la película Contact no está tan alejado de los anhelos científicos en realidad.
Los sondas Voyager siguen caminos diferentes, pero durante estos años no han dejado de enviar información. En su camino, la Voyager-2 a pasado junto a Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno mientras que la Voyager-1 pasó por Júpiter y Saturno solamente. Entre los datos facilitados, hemos sabido cuando alcanzaron la Heliopausa (punto en el que el viento solar se une con el viento estelar o medio interestelar procedente de otras estrellas). Es decir, el límite de la Heliosfera, que es el lugar donde termina la influencia de los vientos solares, en nuestro caso, el final de la influencia de los vientos procedentes de nuestro Sol y que marca los límites de nuestro sistema solar.
Pero la gran noticia salta ahora, cuando sabemos que la Voyager-1 ha realizado un gran hito en la historia de la humanidad ya que según informa el Laboratorio de Propulsión de la NASA, en Pasadena, California, la sonda ya ha sobrepasado el límite de nuestro sistema solar, adentrándose, de esta manera en el espacio profundo, convirtiéndose así, en el único objeto fabricado por el hombre capaz de llegar más lejos hasta ahora.
Las aventuras de las sondas Voyager-1 y -2 no pararán aquí, ya que ambas están dotadas de alimentación artificial hasta el año 2025, fecha en la que se agotarán sus fuentes de energía y se apagarán para siempre sin que sepamos más de ellas mientras seguirán viajando por el espacio, para quizás un día, quién sabe, contactar con alguna civilización alienígena.
Según los datos manejados por la NASA, la sonda Voyager-1 se encuentra a unos 18.000 kilómetros del Sol y viaja a una velocidad aproximada de unos 17 kilómetros por segundo. Sus transmisiones de radio tardan casi 15 horas en llegar a la Tierra.
Curiosidades sobre las sondas Voyager-1 y -2
Como comentaba al principio, una de las misiones de estas sondas es la de actuar como emisarios o embajadores nuestros ante un posible contacto con civilizaciones alienígenas. Por ello, además de reportar información recogida en su viaje por el espacio, las dos llevan incorporadas un disco de oro, y en ellos, grabadas, hay una selección de músicas de distintas zonas del mundo, saludos en 55 idiomas, un saludo del Secretario General de las Naciones Unidas de la época, sonidos de nuestro planeta, 115 imágenes y gráficos explicativos de la localización de nuestro sistema solar y nuestro planeta, con sus características; descripciones del ser humano y la sociedad en que vivimos.
Para terminar con las curiosidades sobre las sondas Voyager, seguro que muchos fans de Star Trek recordarán la trama de la película dirigida por Robert Wise allá por 1979 en la que la humanidad se enfrentaba al inminente peligro proveniente del espacio interestelar, amenaza comandada por “V’Ger” y su afán por conocer al “Creador”, el cual resultó siendo una vieja sonda lanzada en el siglo XX, que tras un largo peregrinaje por el espacio había desarrollado inteligencia propia, ¿su nombre? Voyager.
A veces los grandes logros tardan un tiempo en materializarse…
Da hasta un poco de rollo saber que en 2025 se apagará y quedará para el olvido. Quizás la Tierra deje de existir y esta sonda nuestra seguirá vagando por el universo… O quizás gracias a ella veremos próximamente como nos visitan nuestros vecinos alienigenas? o_O jajaja
De hecho para contactar con existencia alienígena (inteligente o no), no hace falta que reciban la sonda ni la intercepten… tenemos radiotelescopios (siendo el de Arecibo, en Puerto Rico, el más grande de una sola antena) escuchando la red de espacio profundo…
En cuando se apague, por ello, no debería de pasar nada en lo que a contactos exteriores respeta, ya que solo deberían enviar señales hacia las posición indicada… (se incluyen las instrucciones para entender los datos y para crear un reproductor del disco grabado junto a las demás figuras) y con radiotelescopios como el LMT (el que más rango de frecuencias acepta hasta la fecha), el RATAN-600, en Rúsia (más grande monoantena) o el LOFAR en Holanda y Alemania (más grande multi-antena, con 25.000 de ellas) podríamos escucharlos…
Además, ¿quién nos dice que no están aquí entre nosotros? (poned la música de Cuarto Milenio y la voz de Iker Jiménez mientras leéis esta pregunta xD)
“Según los datos manejados por la NASA, la sonda Voyager-1 se encuentra a unos 18.000 kilómetros del Sol y viaja a una velocidad aproximada de unos 17 kilómetros por segundo”
Hay un error. 18 mil kms no es nada. Debe ser como ir de Los Angeles a Berlín.