The Paradise (Galerías Paradise) – BBC
The Paradise, adaptación libre de El paraíso de las damas de Emile Zola, nos traslada a Inglaterra de finales del siglo XIX. Denise Lovett (Joanna Vanderham), su protagonista, es una joven de campo que llega a Newcastle con la esperanza de que su tío Edmund le de un trabajo en su tienda de telas. Por desgracia, su tío se encuentra en una situación límite y está a punto de la quiebra por culpa de la competencia despiadada de The Paradise, unos grandes almacenes que están acabando con el pequeño comercio de la zona. Denise, lejos de hundirse, decide entrar a trabajar en The Paradise, y gracias a su ingenio y su ambición, pronto conseguirá llamar la atención de John Moray (Emun Elliot), el no menos ambicioso proprietario del negocio que convirtió en lo que es ahora la pequeña tienda heredada de su esposa muerta en misteriosas circunstancias.
La serie de la BBC aprovecha para mostrar algunos de los conflictos de la Revolución Industrial, una época llena de cambios y en la que sólo sobrevivió el que, como Moray y The Paradise, supo adaptarse a los nuevos tiempos. Además, como suele suceder en este tipo de series, tenemos un triángulo amoroso, aderezado en esta ocasión por la diferencia de clase, otro clásico del género. Porque tenemos por un lado a los de arriba, los ricos clientes de los grandes almacenes (y su propietario, claro), y por el otro los de abajo, los sufridos trabajadores que deben soportar el menosprecio de la mayoría de sus clientes porque el cliente siempre tiene la razón y, si no, se la damos igualmente.
Una temporada de ocho episodios. Tendrá segunda temporada.
Mr. Selfridge – ITV
Creada por Andrew Davies (creador de la House of Cards original) a partir del libro Shopping, Seduction and Mr. Selfridge, la serie se basa en la vida de Harry Gordon Selfridge (Jeremy Piven, su primer trabajo importante tras Entourage), un empresario estadounidense hecho a sí mismo que a principios del siglo XX se instaló en Londres junto a su familia y creó de la nada Selfridges, la emblemática cadena británica de grandes almacenes.
A excepción del primer episodio, que se centra en el difícil nacimiento de los grandes almacenes a causa del excepticismo de los aristócratas británicos que debían invertir en el proyecto, se podría decir que el resto de la serie tiene mucho en común con The Paradise ya que ambas muestran el día a día de unos grandes almacenes y la introducción de nuevas técnicas de marketing pero lo cierto es que son bastante diferentes tanto en su forma como en su tono en gran parte a causa del protagonismo de Jeremy Piven y su señor Selfridge, un personaje fuerte cuyo entusiasmo marca toda la serie. Eso sí, no os penséis que es todo alegría porque aquí hay mucho drama y amores no correspondidos/imposibles, tanto entre los ricos como entre los pobres, como tiene que ser.
Una temporada de diez episodios. Tendrá segunda temporada.
Dancing on the Edge – BBC
Londres, años 30. Snaley Mitchell (Matthew Goode) es un joven periodista musical y buscavidas que decide promocionar una banda de jazz, la Louis Lester Band, entre la alta sociedad londinense y para ello consigue un jugoso contrato en el Hotel Imperial que, además de proporcionales dinero y fama, permite que los músicos, en su mayoría estadounidenses, dejen de preocuparse por renovar sus permisos de residencia.
Dancing on the Edge probablemente es la más desigual de las cinco series y a la que más le cuesta encontrar su propia identidad y su tono (nunca mejor dicho). En un pricipio parecía que iba a ser una serie musical, después los problemas raciales iban a ser el centro de la narración, pero al final es la trama de misterio (que ni es tal, al menos para nosotros los espectadores, ni es demasiado interesante) la que lo acaba absorviendo todo. Eso sí, ni que sea por su reparto de altura (Chiwetel Ejiofor, John Goodman, Jacqueline Bisset, Joanna Vanderham o el mismo Matthew Goode) se merece un vistazo aunque podría haber sido mucho mejor de lo que es.
Una temporada de cinco episodios.
Call the Midwife (Llama a la Comadrona) – BBC
La BBC soprendió el año pasado estrenando Call the Midwife, una serie de ambientación excelente (como siempre) e historias sencillas basada en las memorias de Jennifer Worth (encarnada en la serie por Jessica Raine), una mujer de clase media alta que en los años cincuenta, justo al acabar los estudios, decidió renunciar de la vida de privilegios que le ofrecía su familia para trabajar como comadrona en el East End de Londres, que por aquel entonces era un barrio marginal.
Call the Midwife es una serie amable, familiar y de ritmo sosegado pero que no rehúye tratar temas tan peliagudos como el racismo o el aborto (tanto natural como forzado) ni se recrea en el drama, a pesar de que muchas de sus historias son realmente dramáticas. Por último, cabe mencionar las necesarias dosis de humor proporcionadas principalmente por la enfermera interpretada por Miranda Hart, y la hermana Monica Joan (Judy Parfitt) que, además de aligerar, convierten a Call the Midwife en un producto más que notable.
Dos temporadas, de seis y ocho episodios cada una, más un especial de Navidad. Tendrá tercera temporada.
Moone Boy – Sky
Y después de tanto dramas, finalmente acabamos con una comedia ambientada en los ochenta. Creada por Nick Vicent Murphy y Chris O’Dowd (que a muchos os sonará por ser el Roy de The IT Crowd y al que probablemente hayáis visto recientemente en Girls) a partir de los recuerdos de infancia de este último, Moone Boy narra la historia de Martin Moone (David Rawle), un niño de doce años, y su amigo imaginario Seán (interpretado por el propio O’Dowd). Martin se encuentra a las puertas de la pubertad pero se resiste a deshacerse de Séan, su único apoyo y válvula de escape para soportar el día a día en una casa dominada por mujeres (su madre y sus tres hermanas que le hacen la vida imposible) y con un padre que se quita del medio en cuanto puede para unirse a su club de padres hastiados.
El humor de Moone Boy es tremendamente entrañable incluso en sus momentos más escatológicos porque se compensa con el carácter naíf de Martin, que ni siquiera reconoce que está teniendo su primera erección mientras ve jugar a Gabriela Sabatini o que entierra las sábanas de su cama tras su primera polución nocturna. Y hablando de la Sabatini, las referencias culturales a la época son constantes pero no se limitan a nombrarlas sino que acaban enlazando su tramas con hechos históricos como la caída del muro de Berlín o la elección de la primera mujer como primera ministra de Irlanda sin que la cosa chirríe.
Una temporada de seis episodios de veinte minutos. Tendrá segunda y tercera temporada.