¿Por qué el Internet de las cosas ha matado la privacidad?

COMPARTIR 0 TWITTEAR

Vivimos en un momento donde la mayoría de nuestras acciones están controladas. Si tenemos un wearable, compartimos datos tan personales como la hora en la que nos levantamos y en la que nos vamos a dormir, además de información sobre alimentación o salud. Si esta información tan privada es capaz de llegar a las manos de las empresas, ¿qué mas podemos esperar en el futuro? Leemos en The Verge, que el Internet de las cosas acabará por terminar con nuestra privacidad, pero nosotros afirmamos que ya lo ha hecho.

Que-es-una-casa-inteligente

La razón principal es que solo con tener un smartphone cualquiera puede enterarse de nuestros hábitos: si lo utilizamos más a cierta hora del día, en qué localización nos encontramos, a qué hora lo paramos o encendemos, etc. Ahora con cada vez más dispositivos conectados, estamos dejando una puerta abierta de par en par para acceder a nuestros datos más personales. Quizá estamos destinados a vivir así dentro de un tiempo, pero el futuro está aquí y es un hecho que el Internet de las cosas ya ha entrado en nuestras vidas.

¿Qué es el Internet de las cosas?

Internet de las Cosas

El Internet de las cosas se trata de un escenario donde existe una conexión entre objetos o personas directamente con el Internet. Para explicarlo con un ejemplo que sea entendible, podemos considerar que se da este fenómeno cuando una nevera decide contactar con el supermercado porque se ha terminado el agua. Esta nevera — o cualquier objeto con esta función — utiliza unos números de identificación para poder contactar con el servicio de Internet que quiere solicitar.

No obstante, no se trata de algo nuevo, lo único que ahora ha empezado a despegar, pero su historia se remonta a 1984. Todo empezó con una máquina distribuidora de refrescos en una universidad americana que era capaz de detectar la temperatura de cada lata y de comprobar su nivel de inventario en todo momento, pero hasta 1999 no empezó a volverse un poco más popular, cuando se estableció como requisito indispensable que los objetos conectados deberían llevar un sistema de identificación por radiofrecuencia.

Actualmente, se habla mucho más de este término, de hecho ya podemos encontrar algunas compañías como Apple con su HomeKit, presentado en la última WWDC, que lo empiezan a incluir en sus productos y aplicaciones. La verdad es que estar rodeados de toda esta tecnología que se controla de manera autónoma parece que sea un paso hacia adelante: ya no tendremos que preocuparnos por los ingredientes que nos faltan, nuestra casa se adecuará a cada momento del día dependiendo de si estamos en ella o no, hasta incluso los hospitales podrían detectar enfermedades en una persona mucho antes de que se manifiesten.

Aún así, quizá nos pueda parecer un poco invasivo, ya que todos estos aparatos conectados continuamente pueden suponer un peligro para nuestra privacidad. Ya se han visto casos donde no todo es tan seguro como parece, hasta incluso Telegram, que afirmaba ser inquebrantable ha sido hackeado recientemente. Debido a esto, no podemos asegurar que todo nuestra entorno sea seguro al 100% con el Internet de las cosas estando presente en nuestras vidas.

El problema persistente de la privacidad

privacidad

Cada vez que sale una nueva innovación, hay muchas dudas sobre si estamos exponiendo nuestra vida de una manera demasiado pública. Ya ocurrió cuando Facebook empezaba a despegar, que hasta fue denunciada, por la posibilidad de compartir los álbumes de fotos con quien se quisiera, además de poder escribir lo que estábamos haciendo en cada momento. Parece que poco a poco se está empezando a calmar, ya que la gente, cada vez más, toma acto de conciencia y se da cuenta que poner en Facebook que te vas de vacaciones es una vía libre para que alguien entre a tu casa cuando no hay nadie en ella.

Aún así, el problema de estar rodeados de dispositivos con estas funciones automáticas, es que pueden seguir dando cuerda a la reducción de la privacidad. Actualmente, todos estamos conectados por las redes sociales, y la inclusión de gadgets en nuestras vidas hace que casi todo se comparta en Facebook, si no somos un poco cuidadosos con los permisos que damos a las aplicaciones. No es raro ver constantemente notificaciones de actividades de un amigo que ha estado jugando a algún juego y se ha compartido en su perfil.

Además, el hecho de tener las casas automatizadas, no evita que cualquiera pueda entrar en nuestro sistema y rastree nuestros movimientos a lo largo del día, por lo que supone una manera más fácil para que alguien nos espíe y decida seguirnos el rastro con una finalidad de entrar en casa cuando no hay nadie o de acceder a nuestros datos más privados.

Hoy en día hay más de 25 mil millones de dispositivos conectados, y se está expandiendo de una manera exponencial, ya que la mayoría de compañías crean más productos destinados al monitoreo y que requieren estar conectados constantemente. En un estudio reciente de la FTC (Federal Trade Comission), se han hecho una serie de recomendaciones, más encaradas al público norteamericano para que puedan sacar el máximo beneficio de ello, a cambio de eliminar el riesgo que este servicio supone.

—- Lo que está claro es que hay que tomar algunas medidas para acabar con los problemas que esto supone. Algunas de las recomendadas por la FTC incluyen reducir el número de datos recolectados por cada cliente, limitar el período de guardado de los datos a cierto número de días — y después ser borrados –, o bien asegurarse que los usuarios instalen los parches de seguridad más importantes.

Lo que debemos tener claro es que en un futuro más bien cercano, todos nuestros datos e información personal estarán a disposición de cualquier persona capaz de romper complejos sistemas de seguridad. Esto ya ha pasado, pero con el auge de estos servicios, cada vez somos más vulnerables a fallos tecnológicos y a caídas del sistema, ya que toda nuestra información pasa por mecanismos externos conectados a Internet.

¿Os gustaría adoptar un sistema donde esté todo automatizado? o ¿Sois reacios a implantar esta tecnología en nuestro entorno?

Archivado en Curiosidades, Internet de las Cosas, Internet y redes sociales, Smartphones, Sociedad
COMPARTIR 0 TWITTEAR

Comentarios (6)

Usa tu cuenta de Facebook para dejar tu opinión.

Otras webs de Difoosion