La República de Bielorrusia ha publicado recientemente una ley que convierte en ilegal para los ciudadanos bielorrusos, y también para los residentes, el acceso y/o uso de sitios web extranjeros (sobre todo para fines comerciales). La violación de esta ley está considerada como un delito menor y se penará con la suma de 125 $ que en moneda local son 1.049.323 rublos.
La ley exige a las empresas y a los particulares utilizar sólo los dominios nacionales para la prestación de servicios en línea, la realización de ventas, o el intercambio de mensajes de correo electrónico. Esto, probablemente, significa que los titulares de un dominio con cualquier conexión a servicios foráneos tengan que renunciar a sus dominios. La ley se iniciará el 6 de enero, destruyendo por completo los beneficios que una red abierta puede tener en la economía y la calidad de vida de los ciudadanos.
Según comentan en Insider la ley es muy similar a la nueva ley aprobada en Malasia, que obliga a los restaurantes en Kuala Lumpur (la segunda ciudad más grande de Malasia) a tener Wi-Fi. En lugar de tratar de aumentar la conectividad, el Gobierno bielorruso está, claramente, tratando de ejercer un control completo sobre el uso de Internet en el país.
Es un hecho que ahora la ley autoriza al gobierno a establecer una lista negra de sitios web para ser bloqueados por los ISPs. Contenido como páginas web pornográficas y todo lo que albergue contenido de naturaleza extremista será bloqueado sin mayor dilación.
Aqui os dejo un fragmento traducido de la Librería del Congreso:
Parece que acorde con las solicitudes de negocios de Bielorrusia, no se puede suministrar nada a través de Internet si el proveedor de servicios utiliza servicios que se encuentren fuera del país. Las autoridades fiscales, junto con la policía y la policía secreta, están autorizadas para iniciar, investigar y procesar a los infractores de tales hechos. Además, la Ley establece que los propietarios y administradores de los cibercafés y otros lugares que ofrecen acceso a Internet pueden ser encontrados culpables de violar esta ley y multados, a la vez que sus negocios podrían ser cerrados si los usuarios de los servicios de Internet prestados por estos lugares se encuentran visitando sitios ubicados fuera de Bielorrusia. La Ley establece que esta disposición puede aplicarse a los particulares si permiten que otras personas utilicen sus ordenadores para navegar por Internet.
Este tipo de leyes, personalmente, me parece que tiran piedras sobre su propio tejado, rompiendo la expansión de la nación como tal y rebentando los derechos y las libertades que las personas deben tener para poder expandir sus horizontes, tanto para la información como para el ocio moderno, que se encuentran inmersos en una expansión que ahora, la población de países de este estilo no tendrán, al menos en un periodo de tiempo que no parece que vaya a durar dos días.
