El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha conseguido, finalmente, lo que lleva persiguiendo desde diciembre de 2010, que la red social Twitter esté obligada a facilitar información confidencial de las cuentas de tres usuarios supuestamente implicados en las actividades de Wikileaks.
La resolución, adoptada por el Juez Federal Liam O´Grady, rechaza anteriores intentos llevados a cabo por la American Civil Liberties Union de frenar esta invasión, sin precedentes, a la intimidad de los usuarios de una red social. En palabras de Aden Fine, abogado de la institución:
Estamos decepcionados con la decisión. Los Derechos Constitucionales están siendo violado, los individuos deben tener la oportunidad de acudir a los tribunales para defender sus derechos.
La información solicitada es extensa, comprendiendo todas las direcciones de correo conocidas por los tres usuarios, todos los registros de conexión y duración de cada una de las sesiones, todas las direcciones IP utilizadas para acceder, los datos bancario, etc. En definitiva, un verdadero ataque a la privacidad de estos usuarios de una forma, a mi modo de ver, injustificada.
Lo cierto es que esta controvertida decisión deja al descubierto lo desprotegidos que están nuestros datos personales cuando éstos se encuentran alojados en los servidores de una empresa estadounidense. Ha quedado demostrado el férreo control de la red que pueden ejercer las instituciones oficiales del que, según presumen, es el país que más se afana en defender las libertades individuales de los ciudadanos.
¿Y tú qué opinas? ¿Está justificado el acceso a la información personal en la red cuando hay un proceso judicial en curso? ¿O, por el contrario, consideras que esta acción ataca de forma desproporcionada la intimidad con la que contamos en Internet?