Sony y Microsoft no están de brazos cruzados mientras Nintendo desarrolla la Wii U. Puede que este año no quieran revelarnos en qué trabajan, y que hasta finales del 2013 los productos finales no lleguen a nuestros hogares. Pero el cambio de generación ya ha empezado, ya surgen los rumores, los juegos actuales han tocado techo gráfico (y alcanzado cotas de calidad propias de una época de madurez)… ¿Cómo nos gustaría que fueran las nuevas máquinas? Yo tengo una visión clara al respecto, y los comentarios están abiertos para que compartáis las vuestras.
Lo primero que necesitamos es dejar atrás el concepto de consola como caja que se conecta al televisor. Cables, discos, accesorios, mucho espacio… Parece obvio que las smart TV van a ir imponiéndose, y que ofrecerán juegos. ¿Por qué no integrar la consola en la propia televisión, mejorando así el discreto software que suelen incluir? Sony y Microsoft pueden cobrar una licencia a los fabricantes, y ampliar enormemente su público potencial. Eso sí, para ello sería necesario que los componentes ocuparan poco espacio, para poder colocarlos en el cuerpo del aparato, y que su coste fuera moderado, para que el precio final del producto resultara razonable. Otro aspecto de hardware a mejorar es el mando: ¿no es engorroso quedarse sin batería, enchufarlo, esperar a que cargue…? Considerando que existen soluciones de carga por inducción bastante económicas, sería ideal que los controladores se cargasen al colocarlos sobre la consola (o sobre el pie de la TV, si mi anterior predicción se cumpliera).
El campo de la experiencia de usuario también debe mejorar, y para ello los fabricantes deben tomar las riendas de su plataforma e imponer unas políticas que primen la calidad. Interesante sería que los inicios de sesión se realizaran automática al reconocernos la cámara de la consola. Otro aspecto a pulir es el tiempo de carga de los juegos, tanto entre fases como al iniciarse. Para atraer al público casual hay que generar facilidad de uso e inmediatez: debe limitarse el tiempo y el número de menús que el usuario sufre desde que enciende la consola hasta que empieza la partida, aunque a los desarrolladores esto no les guste. Incluso afectar al sistema de juego, prohibiendo sistemas de guardado complejos, ofreciendo como única opción un salvado automático, y dejando atrás los mensajes que impiden apagar la máquina mientras se guarda. El objetivo de una consola es la diversión, y para obtenerla hay que tomar medidas valientes en favor de la experiencia de usuario, como bien sabe hacer Apple.
Hay otros aspectos importantes (como el paso del formato físico al digital, algo ya inevitable) o el empleo de videojuegos en streaming (que quizá sea prematuro en la próxima generación), aparte de las novedades referentes al control que seguro que Sony y Microsoft está preparando. En cualquier caso, la próxima generación puede ofrecernos mucho, si los esfuerzos no van encaminados sólo a mejorar los gráficos, que ya muestran un nivel muy alto.
¿Qué te parecen estas ideas? ¿Las consideras realizables, o crees que lo más probable es que las próximas máquinas sigan una línea continuista respecto a las actuales?
Madre mía propones un cambio radical 😀
La verdad es que sobre el tema del hardware creo que puede que tiendan a primar más el coste que la calidad,sobretodo viendo el éxito de Wii
Estoy de acuerdo, las actuales consolas con el hardware que llevan están llegando a unos niveles increíbles, por qué no mejorar lo qué ya tenemos, que no es poco? Empezar a trabajar a partir de ahí, sistemas embebidos en tvs como dices, mejorar experiencia de juego….