¿Quién podría imaginarse que hay algo en común entre el colegio de magia de Harry Potter y uno de los eventos más tristes de la historia de la humanidad? Pues en un día como hoy ambos coinciden de una manera peculiar. Hagamos un viaje en el tiempo para ir de lo terrible de la guerra a la maravillosa capacidad humana de reinventarse, de sima a cima, he aquí el abanico de nuestras posibilidades. Sin duda que hasta en lo más oscuro de la historia hay semillas de luz, por lo que bien merece la pena ir en su búsqueda y aprender algo de ellas.
Nos remontamos a 1919 en Turín, Italia. En un día como hoy ve la luz del mundo por primera vez Primo Levi, escritor que tendría la suerte de ser un superviviente de los campos de concentración. Levi nació bajo una estrella marcada por la persecución y el éxodo: aquella que sirve de símbolo al pueblo judío. Químico de formación, y con ideas liberales muy claras, se unió al movimiento antifascista italiano en un mal momento. Su poca pericia para aquello de las manifestaciones le valió ser arrestado y entregado al ejército alemán tras identificarse como judío. Fue así que desde 1944 fue confinado a Monowice, uno de los campos de concentración que formaban parte del complejo de Auschwitz.
Primo Levi, marcado con el número 174,515, pasó once meses en esta fábrica de muerte. Cuando en enero de 1945 el Ejército Rojo liberó a los prisioneros, Levi estaba entre los veinte afortunados italianos que sobrevivieron (de los 650 que había al momento de su ingreso). La dura experiencia, no obstante, marca el alma y le preña de relatos impulsándola a mostrarle al mundo el rostro de lo terrible para que no suceda más. Lejos de su profesión, Levi nos legó obras de referencia tales como “La tregua” y la más afamada de todas cuyo título puede sonar a pregunta, pero en realidad es un dedo que señala y denuncia: “Si esto es un hombre”. El escritor abandonó este mundo de manera no poco misteriosa el 11 de abril de 1987.
Damos un salto en el tiempo y en el mapa para situarnos en Inglaterra, de nuevo en un día como hoy pero de 1965. Asistimos, una vez más, al nacimiento de un personaje de letras muy influyente en nuestros días: J.K. Rowling. La escritora que dio vida al popular Harry Potter tuvo la feliz ocurrencia de compartir con su personaje su fecha de nacimiento, por lo que, de acuerdo a la historia, el joven mago nació un 31 de julio de 1981. Lo que hay que celebrar sin duda, tanto de la autora como del personaje, no es sólo su aniversario, sino el que han logrado atraer a miles de jóvenes en el mundo al fascinante mundo de los libros.
Claro que la autora se ha llevado una jugosa recompensa. Rowling pasó de vivir en un piso de seguridad social a ser millonaria en sólo cinco años. En 2008 su fortuna se estimaba en unos 798 millones de dólares, siendo en ese momento la doceava mujer más rica del Reino Unido. Sin duda merecido, y esperamos que su talento e imaginación sigan consiguiendo que muchos jóvenes más se inicien en el hábito de la lectura. Como dato curioso habría que decir que en el primer libro de Harry Potter ella pretendía firmar con su nombre completo: Joanne Rowling. Pero los editores, temerosos de que una mujer no fuera bien recibida por el mundo editorial, le solicitaron utilizar dos iniciales antes de su apellido. Como carece de segundo nombre eligió la K del nombre de su abuela paterna, Kathleen, dando como resultado el conocido J.K Rowling, un nombre que hoy no sería cuestionado tan fácilmente.
El mundo de las letras está de manteles largos el día de hoy. Y a través de las páginas de Levi y Rowling tenemos acceso tanto un mundo mágico como a un retrato del mundo real que a veces necesita de más magia de la que pueda haber en todo Hogwarts. ¿Qué os parece la coincidencia? ¿Habéis leído algo de estos autores?