La ciudad de San Francisco se viste de gala ante la llegada del nuevo dispositivo de Apple. El misterio no es más lo que impera en el ambiente con los de Cupertino, pues todos sabíamos que hoy se daría a conocer el nuevo iPhone que, para no perder la línea de sus hermanos, simplemente agregará un 5 a su nombre. Ahora es la curiosidad la que nos invade y un poco de morbo por saber si tras la partida de Steve Jobs la empresa sigue manteniendo su magia.

Tim Cook se encargó de abrir la ceremonia dando una serie de cifras sobre el desempeño de los últimos lanzamientos que la empresa ha realizado en los últimos meses. Mountain Lion, por ejemplo, ha sido descargado nada más y nada menos que 7 millones de veces. La venta del iPad no se queda atrás con 17 millones de piezas vendidas entre los meses de abril y junio. Todo para mostrar el músculo de la empresa de la manzana en el mercado y recordarle al mundo quién es quién en este terreno.

En honor a la verdad hay que decir que la presentación ha perdido un poco de su mística. El bombardeo de cifras de ventas y aplicaciones disponibles está por encima del discurso de cómo la tecnología puede mejorar la vida cotidiana. Resulta notorio que la preocupación en Cupertino es que la competencia les pisa los talones y la creatividad no da para un salto equivalente al que se dio al anunciar los primeros iPhone e iPad. De hecho, como comentábamos con mi estimado compañero Miguel mientras seguíamos la presentación, si tienes que invitar a una banda como los Foo Fighters a tu evento es porque sabes que lo que tienes que decir no llena el escenario.

Ya el propio Miguel ha hecho un excelente artículo con respecto al iPhone 5 y también se puede tener un análisis completo con nuestros compañeros de Applesencia. Personalmente creo que lo que hemos visto hoy desde San Francisco se trata de un interesante lavado de cara del iPhone, pero sólo eso: un lavado de cara. Un teléfono 18% más delgado y 20% más ligero, un procesador A6 lleno de promesas de mayor velocidad y mejor integración con otros componentes del dispositivo (que habrá que ver en acción, por suspuesto). Suena muy lindo, pero sin duda que no es un salto demasiado grande con respecto a su antecesor.

Algunas ausencias resultan notorias: no se habló de la conectividad, donde el nuevo puerto (¡a comprar adaptadores todos!) carece de compatibilidad con microUSB, y la tecnología NFC queda para mejor ocasión. Sí, se mejora con la pantalla retina, pero me parece que se dejan en el tintero mejoras realmente importantes en lo que a conectividad se refiere. Esto habla, de nuevo, de una orientación a hacer el dispositivo más espectacular a la vista, pero no necesariamente más funcional. Tendremos que esperar a las valoraciones del nuevo iOS 6 para saber si algunas de estas ausencias alcanzan a ser subsanadas desde el apartado de software.

¿iPad mini? No, pero aquí tenéis la nueva gama de iPods

A pesar de que se había corrido el rumor de la aparición de un hermano pequeño del iPad que hiciera frente al Nexus 7, éste no ha llegado. Esto resulta completamente lógico si las cifras que nos han presentado muestran una apabullante venta del iPad en unos cuantos meses. ¿Para qué poner sus energías en una versión de 7 pulgadas? Esto podría ser un error, pues se deja ese nicho de mercado a la competencia, pero ya el tiempo lo dirá.

La “sorpresa” de la noche llegó con la nueva línea de iPods. La séptima generación del iPod Nano permitirá visualizar fotos y vídeo. Cuenta con una pantalla de 2.5 pulgadas y la gran novedad es la integración de Bluetooth 4.0 en el dispositivo. Se podrán contar con 30 horas de música y está ya listo para integrase con el programa de fitness Nike+. El precio de la versión de 16 GB será de 149 dólares (única disponible en la Apple Store por el momento).

El iPod Touch quinta generación si que ha sido mejorado para acercarle al nuevo iPhone. Tiene un grosor de 6.1 mm y pesa solamente 88 gramos. Integra una pantalla retina de cuatro pulgadas y cuenta con el procesador A5. Le han montado una cámara iSight de cinco mega píxeles, 1080p para vídeo HD y 720p en la cámara delantera para poder usar FaceTime. Al igual que la versión Nano cuenta con Bluethooth 4.0 y como añadido especial integra a Siri. Un elemento distintivo es el denomindado iPod touch loop, que es un pequeño botón en la parte trasera que permite poner una correa para transportarlo de manera segura. El precio para la versión de 32 GB será de 299 dólares y 399 para la de 64 GB. Todos los nuevos dispositivos irán acompañados de los nuevos EarPods, que son unos renovados auriculares de Apple.

Esto, junto con una actualización de iTunes que le hace más atractiva y simple de usar, ha sido todo lo que se ha anunciado hoy. La presentación de los Foo Fighters se encargó se cerrar la noche para darle a la audiencia la adrenalina que las noticias de los de Cupertino no pudieron dar. Habrá que esperar a que nuestros compañeros de Applesencia tengan estos dispositivos en sus manos para saber de manera cien por ciento confiable qué tanto cumplen con lo prometido las nuevas creaciones de la compañía de la manzana. Por lo pronto, ¿qué os parecen las novedades? ¿Pensáis que van por el camino correcto o la competencia puede comenzar a frotarse la manos?