El arte es un terreno complejo, sobre todo cuando se trata de las propuestas contemporáneas que juegan en la delgada línea entre lo sublime y lo ridículo. La fotografía es una de esas actividades artísticas que ha sufrido una masificación importante gracias a las herramientas tecnológicas con las que contamos. Claro que no todos conocen cómo aplicar de buena manera la regla de los tercios, por más que nuestras cámaras ayuden. Pero lo cierto es que las redes sociales están llenas de fotógrafos amateur que disfrutan del compartir sus imágenes.
Ahora bien, una cosa es mostrarle al mundo lo lindo que es el paisaje en mi destino vacacional y otra muy distinta jugar a ser fotógrafo de desnudos. El cuerpo humano, en su condición desnuda, es como abrir la caja de Pandora. No se trata de querer dar lecciones de moral, sino de entender que la mirada artística, por mucho que se diga, no se obtiene de un día para otro. El tratamiento de la luz, la composición, el tiempo del obturador, el enfoque y el color son elementos que no se combinan de manera espontánea. O mejor, se requiere de trabajo y dedicación para aprender a ver en el mundo la espontánea combinación de estos elementos. Dicho de esta manera, retratar un cuerpo desnudo no es tan fácil como parece en un principio.
Sirva lo anterior para decir que la decisión de Apple de retirar de su tienda de aplicaciones 500px parece precipitada. Cuando Oleg Gutsol y Evgeny Tchebotarev fundaron en el 2001 este servicio de alojamiento de imágenes, no imaginaban la gran aceptación que podría tener. Pronto se lleno de personas que compartían trabajos de muy buena calidad. Basta dar un vistazo a su sitio web y explorar un poco para darse cuenta de que la gran mayoría de lo que ahí se encuentra tiene, al menos, una intención artística. Pero Apple ha considerado que la aplicación muestra imágenes y material pornográfico, además de haber recibido quejas por posible pornografía infantil.
Sin duda que la sección de desnudos del sitio contiene imágenes que, como aparece en algunos comentarios de usuarios, no son lo ideal para el auditorio infantil que podría estar merodeando el sitio. Pero dejando de lado la cuestión de la educación del criterio, 500px no muestra de manera inmediata lo que alcanza a detectar como material sensible. Quizá dar oportunidad para mejorar los filtros de seguridad e incluir una opción de control parental hubiera sido deseable antes de optar por eliminar la aplicación. Pero desde Cupertino se han mostrado tajantes. La cuestión, por otro lado, sigue quedando en el aire: ¿qué hacer en estos casos ante la apertura que permiten la red? Seguiremos en el camino de educar nuestro criterio.
