Hace poco tiempo ya os hablamos de unas filtraciones, bastante fiables, que apuntaban a que los chicos de Cupertino dejarían de contar con Samsung para fabricar sus procesadores y optarían por la firma taiwanesa TSMC, con la que llevaban años negociando, pero que no parecía capaz de atender sus demandas. Este acuerdo se haría efectivo en los productos lanzados en 2014, y conseguiría que la marca dependiese menos de Samsung, dado que las relaciones entre las dos resultan bastante complicadas. Y es que la compañía coreana se ha convertido en la reina del ecosistema Android, y entre sus productos hay alguno que rivaliza directamente con el iPhone 5.
Pues bien, hoy nos llega otra noticia, cuya fuente es The Korea Economic Daily, que asegura que en 2015 la producción del hipotético chip A9 recaería en Samsung, y que se emplearía en el previsible iPhone 6S (aunque se comenta que un nombre más probable sería iPhone 7). El acuerdo se habría firmado el pasado 14 de julio, y la razón de este cambio de proveedor radica en que la firma coreana estaría capacitada para manufacturar el producto a un tamaño de 14 nanómetros con tecnología FinFET, ofreciendo por lo tanto menores consumos y aumentos en el rendimiento.
TSMC no podría igualar esta oferta, por eso no habría logrado el contrato. De todas formas, no resultaría nada extraño que los chicos de Tim Cook empleasen dos proveedores distintos, y derivasen a sus nuevos socios toda la carga de trabajo que pudiesen realizar eficientemente. Por otro lado, Apple ya ha dado pruebas de desear reducir su litigiosidad, así que tal vez sus malas relaciones con Samsung queden en el pasado, y a partir de ahora colaboren en los temas en los que ambas puedan beneficiarse, mientras continúan compitiendo de manera leal en el mercado. Seguiremos atentos a estos rumores, para ver si confirma todo lo que se está comentando.
¿Qué opinas de este tema? ¿Das credibilidad a esta información, o te parece extraño que Apple esté dispuesta a seguir dependiendo de Samsung?
Imagen | Yandle