Vivimos rodeados de enfermedades extrañas o síndromes de los cuáles es probable que desconozcamos totalmente su existencia, pero seguramente hay alguna enfermedad común con la que nos sentimos más identificados, como puede ser una posible adicción a los videojuegos, que aunque parece inofensiva puede acarrear muchos problemas. De todas formas, las hay más peculiares e inesperadas como es el síndrome burnout en deportistas o el que vamos a tratar en este artículo: el síndrome de París.
En un primer momento, nada más escuchar “París” lo relacionamos automáticamente con la ciudad, pero ¿qué tiene para provocar algo así en determinadas personas? Evidentemente, los que lo padecen son turistas que van de visita a la capital francesa con unos determinados prototipos sobre la ciudad que terminan siendo erróneos.
Esta información nos llega desde 1986, dónde un psiquiatra japonés, Hiroaki Ota, describía una nueva enfermedad que afectaba en mayor medida a jóvenes turistas japoneses que habían estado recientemente en París de viaje. Veinte años después, la revista Nervure Journal de Psychiatrie volvía a sacar a relucir el tema, destacando que afectaba a una media de 20 turistas al año.
Es un trastorno psicológico de tipo momentáneo. El motivo principal por el cuál se produce es por el fuerte contraste entre lo que creían que era París y lo que en realidad es. La imagen que los propios nipones tienen de París, es la de una ciudad hermosa e idílica, que no tiene nada que ver con la ciudad inmersa en el bullicio y de estrés con la que se acaban encontrando.
El fenómeno se manifiesta mediante cuadros depresivos, ansiedad e incluso alucinaciones. No se trata de una broma de mal gusto, ya que incluso la propia Embajada de Japón tiene en la propia capital francesa a disposición de sus ciudadanos servicios hospitalarios de urgencia para su tratamiento.
Si tenías pensado ir a “la ciudad de la luz” próximamente, espero que este artículo no te haya quitado las ganas. En ese caso, te invito a que eches un vistazo a estos 5 lugares imprescindibles para visitar en París.
¿Qué te ha parecido este artículo? ¿Habías oído hablar anteriormente de este síndrome? ¿Por qué crees que se da solamente en japoneses?
