Todos hemos pecado de vanidad. En algún momento de nuestras vidas hemos querido compartir un momento y –¿por qué no?– aparecer como el centro del mismo. Un poco de amor propio no está mal, siempre y cuando no caigamos en lo excesivo. Las recientes críticas de narcicismo que ha recibido Kim Kardashian demuestran que el selfie, más que una moda pasajera, se ha convertido en otra pieza fundamental de la internet.
¿Es Kim Kardashian una autoridad del mundo internetero? Yo no lo considero así, pero lo que sí es innegable es su capacidad de autopromoción, puesto que la gracia le va a otorgar todavía más ingresos. Y es que se planea la publicación de un calendario recogiendo sus mejores imágenes.
Los ‘selfies’ y el mundo de la publicidad
Todos conocemos la famosa estampa de la noche de los Oscars, pero tal vez pocos conozcan los datos e importancia que tuvo como spot publicitario. El grupo Publicis aseguró que la foto tiene un valor de entre 800 y 1.000 millones de dólares obtenido por su repercusión en el valor de marca a nivel mundial, y es que todos sabemos que la foto fue tomada desde un terminal Samsung.
La importancia de las imágenes en internet es tal que se estima que compartimos 1.800 millones de fotos diariamente afirmado por la agencia KPCB a través de su estudio Tendencias de Internet 2014.
El futuro: publicidad en tus selfies
Actualmente gigantes del mundo online como Google y Facebook están pagando enormes cantidades de dinero para hacerse con compañías que se dedican a la recolección y análisis de datos de preferencias del mercado a través de los hashtags que suelen acompañar a las fotos que publicamos. Y no son los únicos que invierten en este tipo de información: la firma de bolsos y accesorios de moda Vera Bradley descubrió de esta manera que la principal motivación de compra de sus productos era por ser considerados regalos para niñas que recién cumplían los 16 años.
Pero no todo es color de rosa en los estudios de mercado, y no todas las tendencias y/o preferencias responden a patrones estadísticos. De hecho ,según el Director General de Ditto Labs, “sólo un 15% de las fotos tienen etiquetas relacionadas”.
El gran reto de los anunciantes por supuesto está en como mantener este tipo de contenido como algo bien visto por los usuarios, su creatividad determinará en que grado serán percibidos cómo cool o cómo simples artífices de publicidad invasiva.
Fuente | Todd Wasserman en Mashable.
