Leemos en The Wall Street Journal que un vicepresidente de Google, Alan Eustace, acaba de batir el récord mundial de salto desde la estratosfera, en poder del austríaco Felix Baumgartner, al saltar desde una altura de 41.148 metros.
Seguro que recordáis la increíble hazaña realizada, hace ahora 2 años (el 14 de octubre de 2012), por el austríaco Felix Baumgartner, el cual, en un evento patrocinado por Red Bull, multada recientemente por engañar con su famoso eslogan publicitario, y retransmitido por televisiones de medio mundo, consiguió batir varios records mundiales al saltar desde una altura de 39.068 metros, siendo el primer hombre en hacerlo a esa altitud, y convirtiéndose también en el primer ser humano en romper la barrera del sonido en caída libre.
Ahora, un vicepresidente de Google, Alan Eustace, ha conseguido batir el récord de altitud de Baumgartner, al saltar desde 41.148 metros, rompiendo también la barrera del sonido durante su caída, aunque a una velocidad inferior a la que alcanzó el austríaco. Al igual que Baumgartner, Alan y su equipo acudieron al desierto de Nuevo México, desde el cual despegó en un simple globo científico que lo transportó hasta el punto de salto durante más de 2 horas.
Para conseguir esta hazaña, Alan Eustace, que incluso se tomó un período sabático en Google, junto a varios ingenieros y empresas, encabezadas por la compañía Paragon Space Development Corporation, prepararon todo la infraestructura y logística necesaria, junto con el traje que llevó durante el salto, especialmente desarrollado para la ocasión.
Además del récord establecido, otro objetivo de esta misión, denominada StraTex (abreviatura de explorador estratosférico en inglés), se centra en desarrollar un traje espacial y un sistema de recuperación que permitiese la exploración tripulada de la estratosfera (por encima de los 30.000 metros), así como realizar estudios científicos de esta capa de la atmósfera, el desarrollo de medios alternativos para evacuar a las tripulaciones de naves espaciales, el estudio de la dinámica de cuerpos a velocidades Mach 1, etc.
A diferencia del salto Baumgartner, donde al principio del salto, el austríaco tuvo problemas para estabilizarse dada la gran velocidad que alcanzó, el salto de Alan fue más suave, gracias al desarrollo de un sistema de estabilización llamado Saber. Otra diferencia con la hazaña de Baugartner es con respecto a la publicidad, ya que en el primer caso tanto la fase previa como el evento fueron publicitados a bombo y platillo, y en el de ayer, Alan Eustace mantuvo casi en secreto la preparación y ejecución de su misión, rehusando incluso el apoyo de Google para participar en el evento.