No es la primera vez que George R.R. Martin, autor de la saga Canción de Hielo y Fuego, declara que no le acaba de convencer el diseño del Trono de Hierro que aparece en Juego de Tronos (Game of Thrones). Según el escritor, el trono que aparece en la serie de la HBO es mucho más pequeño e infinitamente menos amenazante de lo que debería ser.
El trono de la HBO es grande, sí, pero ni de cerca tan grande como el descrito en las novelas. Y por una buena razón. Tenemos un estudio enorme en Belfast con el salón del trono pero no lo suficiente como para alojar el Trono de Hierro tal y como me lo imaginé.
Para eso necesitaríamos uno mucho más grande, algo así como el interior de la Catedral de Saint Paul o la Abadía de Westminster, y ningún estudio tiene tanto espacio. La versión del libro del Trono de Hierro ni siquiera cabría por las puertas de Paint Hall (estudio de grabación).
Ya que la logística hace prácticamente imposible que jamás veamos en pantalla (ni grande ni pequeña) el Trono de Hierro en todo su esplendor, el autor se alió con el artista Marc Simonetti, que lo ha dibujado siguiendo sus instrucciones y el resultado lo podéis ver a continuación.
El Trono de Hierro es enorme. Se eleva sobre la habitación como una gran bestia. Y es feo. Es asimétrico. Fue elaborado por herreros y no por artesanos ni expertos en la construcción de muebles.
La ilustración, que como veis muestra un trono muchísimo más amenazante que el que aparece en la serie, estará incluida en The World of Ice & Fire: The Untold History of Westerns and the Game of Thrones, un libro de próxima publicación paralelo a la saga que narra la historia no contada de Poniente.
