China domina al mundo en muchísimas cosas, y es que a pesar de tener fama de copiar todo producto occidental, lo cierto es que en cantidad de patentes e inventos nadie les supera. Esto se debe en parte a que su gobierno les alienta a ser inventores, desde ofrecerles efectivo o empleos en universidades hasta liberándolos de la cárcel. Sí, liberándolos de la cárcel.
Esta política inusual salió a la luz el mes pasado cuando se descubrió que una empresa se dedicaba a vender a presos ricos ideas y patentes para que estos las ofreciese al gobierno a cambio de ser liberados. ¿Que cómo funciona esto?, muy simple, el gobierno chino ofrece reducciones de penas de cárcel para personas que aporten “innovaciones técnicas importantes”, lo que viene a ser una buena patente.
Desde Occidente es difícil intentar comprender el funcionamiento y la forma de pensar oriental, sin embargo, China está haciendo un esfuerzo tremendo por intentar demostrar a cualquier precio el potencial que pueden tener. Esto nos lleva a situaciones tan inusuales como el hecho de que las cárceles chinas se están convirtiendo en focos de inventores aficionados. ¿Qué otras leyes habrán para impulsar la reputación de China como potencia mundial?
Carl Minzner es un profesor especializado en las leyes de China y explica que el código penal chino describe algunas razones por las que se puede reducir la condena. En cierto modo aportando innovaciones técnicas importantes el preso está contribuyendo a una sociedad mejor donde se pueda aplicar dicha idea. Viene a ser un poco como las reducciones de condena en Occidente por cooperar con la policía.
El número de patentes se ha disparado en China en los últimos años. En 2013 por ejemplo se registraron más de 600.000, mientras que en 2003 la cifra no superaba los 40.000. Para que nos hagamos una idea, en 2013 en Estados Unidos –país que consideramos innovador y potencia mundial en avances– se registraron unas 300.000 solicitudes de patentes.
Definitivamente el hecho de que China impulse y favorezca a los inventores y a las mentes brillantes que descubren nuevas ideas para la innovación técnica es algo de admirar y que deberíamos tomar como ejemplo en el resto del mundo. Sin embargo, hacerlo también con presos y sabiendo que hay sobornos y corrupción de por medio no da una muy buena imagen al resto del mundo.
Pero, ¿más patentes significan necesariamente más innovación? Desde luego que no, la acumulación de patentes ha provocado que cada vez se registren más patentes tan solo por los incentivos o por impedir que lo haga la competencia. Además, a fin de cuentas tan solo son ideas, llevarlas a la práctica es otra historia.
De todas formas quién sabe, tal vez la próxima gran tecnología que revolucione y cambie el mundo venga de una prisión. Son focos de innovación, después de todo.