Hace poco supimos que la compañía japonesa de videojuegos ya está trabajando en el proyecto Nintendo NX, que debería desembocar en el lanzamiento de una nueva consola en el 2016. No es ningún secreto que la Nintendo Wii U ha representado un fracaso que llevó a las pérdidas a una compañía líder durante la anterior generación. Podría parecer que lo lógico sería hacer borrón y cuenta nueva, con la presentación de una máquina completamente distinta, pero lo cierto es que muchas de las ideas que ha aportado este aparato resultan muy interesantes.
Así que vamos a analizar qué es lo que ha fallado en la Nintendo Wii U, descubriremos que algunos de sus aportes son valiosos, y especularemos con algunas posibilidades para enriquecer el concepto. Por último veremos que, aunque sería muy interesante que Nintendo Wii U contara con una sucesora basada en las mismas ideas (pero mejoradas), esto supone ciertos riesgos para la empresa. Comienza nuestro viaje al futuro del entretenimiento interactivo:
¿Qué ha fallado en Nintendo Wii U?
Aunque la Nintendo Wii U fue muy criticada en su momento por ofrecer una potencia gráfica bastante reducida, la verdad es que la Nintendo Wii resultó un rotundo éxito a pesar de sufrir el mismo problema. Tal vez la potencia se trata de uno de los factores que perjudica a Nintendo Wii U, pero no es el decisivo, ni mucho menos.
Por otro lado, sólo Nintendo hace juegos interesantes para sus consolas a día de hoy, y eso supuso que el primer año la Nintendo Wii U tuviera una catálogo muy escaso… lo que contrastaba con la enorme cantidad de juegazos que salieron en el último año de PlayStation 3 y Xbox 360. Sin embargo, no es justo comparar el principio de una generación con el final de otra, y en 2014 Nintendo Wii U ofreció, para sorpresa de todos, mejor catálogo (aunque más reducido) que PlayStation 4 y Xbox One. La falta de juegos representa un inconveniente grave, pero tampoco es el determinante.
El verdadero problema es que propio concepto de la consola, que nunca ha conquistado al público ni se ha llegado a aprovechar. La idea de tener dos pantallas para jugar (el mando tablet y el televisor) no ha gustado como la hizo en su momento el controlador de la Wii, y pocos juegos le han sacado partido de una forma interesante. Ni siquiera los títulos multijugador, en los que se combinan el mando tablet con los de movimiento, han llegado a seducir a los aficionados. El error es de base, la premisa en la que se asienta la plataforma resulta equivocada.
Pero el formato es válido
Lo cierto es que la idea de las dos pantallas no tiene mucho sentido, pero sí que se puede disfrutar mucho de la Nintendo Wii U como una “consola portátil doméstica”, algo que soportan casi todos los títulos. Resulta muy cómodo, en vez de jugar en el televisor, hacerlo directamente en un dispositivo independiente, que podemos llevar de una habitación a otra. No es lo mismo que una portátil, ya que el hecho de que se pueda incluir una pantalla grande y botones de tamaño estándar mejora mucho la experiencia.
Así que considero una buena idea que la próxima sobremesa de Nintendo tuviera el mismo formato que el mando de la Nintendo Wii U. Lo adecuado me parecería dejar de lado la consola en sí, incluyendo la unidad de proceso en el propio mando. Eso limitaría su potencia, pero parece poco probable que la empresa pretenda competir en este aspecto. Así que vamos a ver cómo podrían usarse los cimientos actuales en una futura Nintendo NX.
Cómo potenciar un concepto interesante
Obviamente, no basta con coger el mando de la Nintendo Wii U, ponerle un procesador interno y venderlo. Resultan necesarias muchas mejoras, como una pantalla más grande, de una resolución decente y con un panel de una calidad aceptable. Pero, teniendo en cuenta que esta máquina en ningún caso conseguiría destacar por los gráficos, además debería aportar ideas innovadoras para hacerse un hueco en el mercado.
Se podría optar con novedades pensadas para atrapar a nuevos consumidores, pero incluso más interesantes resultarían otras que atrajesen a los jugadores de toda la vida. Es decir, que la nueva consola aportase innovaciones que sacaran partido de su formato especial, y que estuvieran fuera del alcance de la competencia. Juegos para el aficionado tradicional, pero con un toque único. Estas son algunas de las posibilidades:
3D sin gafas
Ya hemos visto que la New Nintendo 3DS podría resucitar el efecto 3D sin gafas gracias a sus mejoras técnicas, entre las que destaca un sistema que controla la posición de nuestros ojos para evitar que se pierda la ilusión de tridimensionalidad. El 3D sin gafas no funciona bien en televisores, así que Nintendo contaría con la oportunidad de ofrecer una prestación única y que, por primera vez, tendría un nivel de calidad suficiente para marcar la diferencia.
Sonido 3D
El sonido binaural posibilita una sensación espacial increíble usando sólo unos auriculares estándar. Por ahora, trasladar esta experiencia a unos altavoces es algo que se encuentra en fase experimental, pero no estaría mal que Nintendo invirtiera un poco en innovación y desarrollo, sobre todo considerando que cuenta con fondos suficientes, y que el diseño del mando de la Nintendo Wii U es idóneo para facilitar esta característica. Desde luego, sería una gran experiencia notar el sonido de un enemigo llegando por detrás sin necesidad de un aparatoso sistema de altavoces 5.1.
Seguimiento de ojos
Dado que Nintendo NX tendría un sistema de eye tracking para el 3D, ¿por qué no aprovecharlo al máximo? Ya existe un accesorio llamado Tobii (soportado por el juego Assassin’s Creed: Rogue) con el que controlamos la cámara con la vista, sólo mirando a dónde nos apetezca, sin necesidad de usar un stick. Este sistema también se puede usar para manejar personajes o generar eventos, o incluso para dar lugar a interacciones jugables, como que un secundario reaccione cuando lo miremos.
Juegos con olor
Hace mucho tiempo que se habla de incorporar olores a los juegos y las películas (aunque en algunos cines esto ya es una realidad), y Nintendo lo podría implementar en un mando como este. La cantidad de olores sería limitada, pero enriquecería la propuesta, y la venta de recambios supondría un buen negocio para la empresa. Incluso Microsoft pensó en un sistema así para su Xbox One, aunque finalmente no lo incluyó.
Siri en la consola
Sería revolucionario poder hablarle a los personajes de un juego y que nos contestaran con alguna pequeña broma, un consejo sobre la aventura o simple cháchara insustancial. Esta tecnología existe en los asistentes de voz de smartphones como Siri o Cortana. No se trata de mantener grandes conversaciones, pero la ilusión de hablar con la consola podría ser genial. Obviamente, Nintendo tendría que buscar un proveedor externo para este sistema, ya que le saldría muy caro desarrollar un software así en exclusiva para ella misma, sobre todo por la gran cantidad de idiomas a soportar
El riesgo de no cambiar de modelo
El gran problema que supondría una consola que heredara el aspecto externo del mando de la Nintendo Wii U es precisamente el fracaso de esta máquina. Aunque se podrían añadir muchas cosas y dejar de lado el concepto fallido de dos pantallas, ciertos usuarios se quedarían con la idea que se está intentando continuar con una idea que no funciona. Soy consciente de que para la compañía resultaría más prudente dejar de lado todo lo relacionado con Nintendo Wii U y comenzar de cero.
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Así que esto es lo que podría ser Nintendo NX, una “consola portátil doméstica” para jugar tirado en cama o en el sofá, sin necesidad de un televisor. Por su formato especial conseguiría aportar características exclusivas e innovadoras, de forma que muchos clientes de Sony y Nintendo querrían una segunda consola, diferente en su concepción y con juegos propios como los Mario o los Zelda. Queda un año (por lo menos) para conocer Nintendo NX, así que esperemos que la compañía nipona no nos decepcione con su próxima propuesta.
