Que cada vez utilizamos más el teléfono móvil es un hecho, especialmente en España, país en el que los smartphones han ido en aumento durante los últimos años, quedando en uso por detrás de países como Estados Unidos o Japón. La mayor parte de la población no puede vivir sin mirar el móvil varias veces al día, ¿puede ser esto una señal de adicción?
Un estudio reciente ha querido investigar las actividades que realizamos con nuestro smartphone y que indican que nos estamos volviendo adictos a él. En el estudio han participado 164 estudiantes de universidades y en las preguntas se pedía que respondiesen el tiempo que dedicaban a 24 actividades del teléfono móvil por día.
Al final se revelaron las actividades que se asocian con adicción, así como las que se piensa que pueden provocar adicción pero en realidad no lo hacen. Esta adicción se encontró que era muy diferente entre mujeres y hombres, pero que nos volvemos adictos al móvil por el deseo de conectar socialmente con nuestras amistades.
Actividades que indican adicción
Las actividades que se pueden hacer mediante un smartphone son ilimitadas, y además están en constante aumento. Primero debemos entender que hay una diferencia fundamental entre las adicciones a Internet y las adicciones en Internet. Esta misma lógica se extiende también en el uso de los smartphones. Varios psicólogos indican que la investigación debe buscar entre la tecnología que se utiliza para las actividades que atraen a los usuarios a una tecnología en particular.
Cuando un usuario de smartphone encuentra sentimientos de felicidad o de disfrute de una actividad particular — un vídeo de Vine enviado por un amigo — , esta persona es más propensa a volver a realizar esta actividad de nuevo. El uso de una actividad particular en el teléfono móvil también puede operar de manera contraria. Cualquier actividad en la que vemos un premio, puede resultar adictiva, por lo tanto más tiempo destinado a ello.
Un psicólogo especialista en Internet (Griffiths), argumenta que de todas las actividades que se pueden realizar online, algunas pueden crear más hábitos que otras. Este caso es el mismo cuando hablamos de las diversas actividades que uno puede hacer mediante el smartphone.
Cómo evitar usar tanto el smartphone
En total, los estudiantes universitarios del estudio pasan 9 horas mirando el smartphone cada día. Sin duda es una cifra muy elevada y que debería reducirse, ya que este tiempo gastado lo podríamos dedicar a actividades más productivas de nuestro día a día. Nos quejamos de que no tenemos tiempo para hacer cosas, pero en verdad lo que hacemos es invertirlo de otra manera menos productiva.
En The Verge nos cuentan algunos trucos para no utilizar tanto nuestro smartphone y así poder ser más felices. Nos lo explican con un vídeo que podemos ver a continuación. Gracias a estos consejos podremos dormir mejor por las noches y estaremos más atentos a nuestro alrededor.
10 steps to healthier smartphone habits:
Posted by The Verge on Tuesday, July 7, 2015
Silenciar el teléfono móvil. El primer día durante 15 minutos, el segundo 30, e ir aumentando progresivamente. Solo cuando haya pasado este tiempo podremos utilizar nuestro teléfono de nuevo.
Apagar nuestros datos móviles durante 1 día y medio.
Leer un libro
Llevar una libreta con nosotros
Apuntar ideas en la libreta
Dibujar
No mirar el móvil cuando estemos con amigos y ellos lo hagan
Internet siempre te estará esperando y no va a ningún sitio, míralo cuando llegues a casa.
No duermas con tu teléfono, tus ojos merecen descansar. Respira hondo y ya verás como consigues dormirte enseguida.
Estos consejos son un poco complicados y que nos puede costar al principio por la costumbre que tenemos de mirar el teléfono en horas muertas o de revisar Twitter cuando estamos esperando a que llegue el metro. No obstante, la sensación de pánico que nos da hacer esto desaparecerá al cabo de unos días cuando ya estemos un poco más acostumbrados.
En mi opinión, si nos lo proponemos, todo es posible, por lo que creo que medidas tan drásticas como apagarlo durante 2 días nos podrían llevar muchos dolores de cabeza. Al fin y al cabo, el teléfono móvil sirve para emergencias, e intentar evitar estas cosas puede hacer que cuando lo encendamos de nuevo nos llevemos alguna sorpresa desagradable que podríamos habernos ahorrado antes.