Corea del Norte retrasará sus relojes 30 minutos para establecer su propia “hora de Pyongyang”, según la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA). De esta manera, el país vuelve a la zona horaria utilizada en toda la península antes de la ocupación japonesa, cuando las autoridades coloniales decidieron que Corea cambiar su zona horaria para adoptar la de Tokio en 1912.
Reza el informe de KCNA:
Los malvados imperialistas japoneses cometieron crímenes imperdonables tales como privar a Corea de su horario estándar, además de pisotear despiadadamente su tierra.
El huso horario de Corea del Norte es de nueve horas por delante del meridiano de Greenwich, el mismo que en Corea del Sur y Japón. Corea del Sur ha dicho que va a seguir utilizando su zona horaria actual, ya que es más práctico. Para Corea del Norte, el movimiento es especialmente poco útil, sobre todo para los trabajadores del complejo industrial de Kaesong, una zona económica conjunta en la que están empleados trabajadores de ambas Coreas.
No hay constancia de que ningún antecesor del joven líder Kim Jong-un se haya pronunciado acerca de ningún cambio horario, según Adam Cathcart, un especialista en Corea del Norte y los asuntos chinos de la Universidad de Leeds, en el Reino Unido.
Declara Cathcart por correo electrónico a Quartz.
Obviamente, esto crea otro elemento caótico en las relaciones intercoreanas en cuanto a la unificación a largo plazo. Justo cuando se pensaba que las cosas no podían complicarse más, lo hacen. La declaración de este cambio que dice tener alguna relación con la liberación continua y perpetua de Corea del Norte desde el imperialismo japonés parece ser una simple justificación para imponer otro medio oficial para colocar a Corea del Norte fuera del sistema mundial, el comercio regular y las relaciones con sus países vecinos.
La hora de Pyongyang” entrará en vigor el 15 de agosto, en conmemoración al 70 aniversario de la libertad de la península del dominio japonés impuesto desde 1910 hasta 1945.