Cuando me compré un Google Nexus 5 a finales del 2013 nunca pensé que dos años después seguiría siendo el modelo más exitoso de la familia, sobre todo porque sus carencias no pasaban desapercibidas ni en un primer contacto. Los smartphones posteriores han mejorado en lo técnico mi dispositivo, pero no han logrado la misma popularidad entre el público. El Nexus 6 no generó ni el más mínimo interés, mientras que los Nexus 5X y Nexus 6P son atractivos, pero en modo alguno rompedores.
Se supone que, cuando un dispositivo recibe un sucesor, este debería resultar más deseable. La situación de Google supone un desastre, aunque no podemos negar que es razonable que se cansara de vender smartphones de gama alta a precios que seguramente provocaban pérdidas. En cualquier caso, vamos a repasar la historia reciente de la familia Nexus para comprobar cómo se encuentran las cosas a día de hoy.
Nexus 4, el inicio de la leyenda
En el 2012 el Google Nexus 4 levantó verdaderas pasiones, y generó muchas frustraciones por las dificultades para conseguir una unidad. Se trataba de un terminal muy avanzado, cercano a los líderes del mercado, por un precio de 299 euros, que era la mitad que el de otros rivales. En su momento yo me hice con un Nexus 4 y no me arrepiento en absoluto, de hecho el terminal aún es perfectamente usable a día de hoy, y muchos modelos de gama media actuales ofrecen prestaciones a su nivel.
No podemos negar que el Nexus 4 tenía puntos débiles, como una cámara muy mala, un almacenamiento base reducido, una autonomía limitada y unos acabados en vidrio en la carcasa trasera que lo hacían innecesariamente frágil. Pero, sobre todo, su gran problema fue que un éxito tan elevado provocó que muchos usuarios tuvieran que esperar meses para hacerse con una unidad, ya que LG los fabricaba y no había recibido un encargo muy grande por parte de Google. Sin embargo, el año siguiente Google tenía preparada una sorpresa…
Nexus 5, un mito… ¡con muchos errores!
Al año siguiente llegó el Google Nexus 5 (también de LG) que, a partir de 349 euros, superaba notablemente a su predecesor: pantalla más grande y mayor resolución, una cámara y autonomía un poquito mejores, más almacenamiento, unos acabados correctos… De nuevo tuvieron lugar problemas de stock, pero en modo alguno tan graves como en la anterior generación. El Nexus 5 representó un gran éxito, pero no podemos negar que no era perfecto.
Su cámara era simplemente correcta en su momento y, a día de hoy, se ha quedado muy atrás. La batería resulta pequeña, y no ofrece una buena autonomía. Google nunca se ha esforzado demasiado en este tema con ningún Nexus, entendemos que no le interesa, por algún motivo. Así que es curioso que, a pesar de que el Google Nexus 5 tenía bastante margen para mejorar, sus sucesores obtuvieran un recibimiento muchísimo menos entusiasta.
Nexus 6, un precio exagerado
Ya fuera porque las cuentas no cuadraban o porque sus socios del ecosistema Android se quejaron, Google se olvidó del bajo coste con el Nexus 6. Encargó este terminal a Motorola, una empresa que había vendido a la marca china Lenovo hacía poco, y el resultado dejó mucho que desear. El precio de 649 euros sólo era parte del problema. Claro que resultaba alto, pero lo grave es que otras marcas ofrecían mejores terminales por cifras similares. El Nexus 6 tenía una cámara muy superior a la de sus antecesores, pero no a la altura de su precio, y la pantalla tampoco destacaba.
A eso hay que sumar que su tamaño de 6 pulgadas causó bastante rechazo. Parecía que los consumidores deseaban terminales más y más grandes, pero en las 6 pulgadas apareció un tope claro. El Nexus 6 era demasiado aparatoso. Al final, fue muy criticado y no parece que las ventas hayan sido demasiado buenas. Sin lugar a dudas, se trata del Nexus más controvertido.
Nexus 5X y Nexus 6P, la decepción
No podemos decir que la última generación de Nexus haya supuesto un error tan grave como el anterior modelo. De hecho, algunos detalles son muy interesantes: Google ha dejado claro con estos modelos que el futuro de Android son los lectores de huellas dactilares y el nuevo puerto USB Type-C. Nosotros ya te hemos presentado el Google Nexus 5X de LG y también te hemos dado a conocer el Google Nexus 6P de Huawei, y no son malos terminales. Pero tampoco van a revolucionar nada.
Sobre todo en Europa, porque aquí el Nexus 5X costará 479 euros (frente a 379 dólares en Estados Unidos) y el Nexus 6P saldrá por 649 euros (en lugar de 499 dólares). No sabemos si los precios de Google resultan justificados (no lo parece) pero, en cualquier caso, no son cifras que vayan a transformar estos productos en superventas. Los fans de Android puro que quieran recibir actualizaciones del sistema rápidas verán la propuesta muy interesante, pero el grueso de los usuarios encontrará en muchas otras marcas productos más atractivos.
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Así que está claro que Google se esforzó demasiado con los Nexus 4 y Nexus 5, y ahora no es capaz de lanzar nada a la altura. O más bien podemos pensar que no tiene interés en volver a romper el mercado, ya sea porque no quiera afrontar esos costes, porque crea que Android no necesita tal ayuda por su parte o porque no desee enfrentarse a sus socios de la plataforma. Lo que está claro es que Nexus 5 2013 sigue siendo el mejor de la familia, y eso representa un problema para sus sucesores.
¿Qué opinas tú de este tema? ¿Crees que el Nexus 5 ha sido el mejor hasta el momento, o consideras que los modelos de este año tampoco están nada mal?