Hace unos días, con unos compañeros de la universidad decidimos hacer un estudio de mercado sobre la distribución de los supermercados en el futuro. Cuando preguntamos a la gente como se esperaba hacer la compra en el futuro, la mayoría pensaba que en unos años estaría todo automatizado y que nos llegaría la compra a casa en el día y la hora que nosotros escogiésemos sin tener que preocuparnos por ir al supermercado.
Algo que es muy interesante hoy en día es que mucha gente joven odia ir al supermercado a hacer la compra. Los hábitos de vida y de consumo que tenemos van muy rápido, por lo que no podemos perder tiempo en ir al supermercado y debemos emplearlo realizando otras actividades que nos llenen más, o bien en los estudios o trabajo.
Está claro que en el futuro vamos a tener a personas o robots comprando por nosotros y trayéndonos estos productos a casa, pero de momento ya disponemos de algunas alternativas que nos permiten ahorrar este tiempo y comprar bajo nuestra demanda en el momento que nosotros creamos. Seguro que muchos ya habéis oído hablar de Amazon Dash, un botón conectado a Internet en el que pulsándolo recibimos la compra en casa. Ayer, una compañía llamada hiku anunció la segunda generación de su dispositivo de compras, te lo explicamos en más detalle a continuación.
¿Qué es hiku?
Igual que con Amazon Dash, los clientes que utilizan hiku pueden hablar o escanear los productos que quieren pedir, luego estos se guardan en una lista de la compra y se relacionan con el inventario online que tiene el supermercado escogido — de momento solo Walmart o Peapod en los Estados Unidos –. El dispositivo contiene un botón que se pulsa antes de hablar, pero también se puede utilizar el Wi-Fi integrado para conectar nuestro smartphone para escanear el código de barras de los productos y sincronizarlo con la aplicación de hiku.
La compañía fue fundada en el año 2012 y la primera versión del dispositivo fue lanzada antes que Amazon Dash. No obstante, la popularidad de Amazon es beneficiosa para hiku, ya que la existencia de Dash está empezando a educar a los consumidores acerca de los dispositivos de la compra. Hiku se puede beneficiar de ello una vez estos hábitos de consumo estén más extendidos entre la gente.
La última versión de hiku incluye un gran número de mejoras respecto a la primera, incluyendo una grabación de voz y escaneo más rápidos, mejor reconocimiento de voz y más resistencia a los líquidos. Pero la actualización más interesante del dispositivo viene por la parte de software, ya que la compañía ha podido acceder a las bases de datos de productos de los supermercados para conectarlas directamente al dispositivo. De esta manera se consigue una mejor eficiencia en la compra y los usuarios pueden ver en todo momento las unidades disponibles de los productos
Learning by doing
Se trata de un término económico que se refiere a la mejor optimización de los recursos disponibles de una empresa a medida que se van utilizando. Gracias a ello, cada vez que se hace una actividad, podemos reducir los costes de ella en el futuro porque poco a poco iremos aprendiendo a ser más eficientes en ello. Lo importante no es aplicar nuevos conceptos, sino centrarse en los existentes y aplicarlos a nuevas situaciones.
En este sentido, para utilizar hiku, no se necesita escanear un código de barras cada vez que queremos comprar un producto. Podemos pedir productos genéricos como leche, huevos o pan y el dispositivo los comprará por nosotros utilizando productos que tienen sentido basados en nuestras elecciones anteriores. En otras palabras, el dispositivo aprende de nosotros cuanto más lo utilicemos.
Sin embargo, desde la propia aplicación también podemos mirar nuestra lista de la compra para ver como ha relacionado los productos que hemos escogido con los que hay en el supermercado. Si no estamos contentos con la relación predeterminada podemos editarlo, ya que al pulsar en un producto, hiku nos dirá las opciones alternativas que tenemos y lo recordará para la siguiente vez que lo utilicemos.
De momento este dispositivo solo se encuentra en los Estados Unidos y su precio de venta es de 49 dólares hasta final de año. De momento no se saben planes para expandirse a otros mercados, pero la compañía ha conseguido casi 4 millones de dólares en financiación. Visto esto, seguro que salen competidores europeos o españoles en poco tiempo. El futuro de hacer las compras está llegando, pero aún queda mucho por ver y por evolucionar. Seguro que pronto podemos disfrutar de neveras conectadas a Internet que permitan hacer estas cosas automáticamente sin la necesidad de interacción humana.
¿Conocías a hiku? ¿Cómo ves la distribución futura en los supermercados dentro de unos años
