Tras varios meses de batalla legal, en un conflicto que ha llegado hasta el Congreso de Estados Unidos, parece que los problemas entre Apple y el FBI americano ya se han solucionado. La lucha entre ambas partes se había convertido en una polémica que debatía si había que anticipar la seguridad a la privacidad ciudadana, con diferentes participantes en cada bando.
Como seguramente ya sabrás debido al alcance del conflicto, el origen de la lucha legal entre Apple y el FBI se encontraba en el atentado terrorista de San Bernardino del 2 de diciembre, que se saldó con 14 víctimas muertas y 21 heridos. El iPhone de uno de los responsables de este acto cayó en manos del FBI, que posteriormente pidió ayuda a Apple para desbloquearlo y obtener la información que contenía.
Apple se negó a colaborar con el gobierno de Estados Unidos, alegando que crear una puerta trasera para acceder a sus dispositivos solo afectaría a la privacidad de sus usuarios. La compañía llegó incluso a desobedecer una sentencia judicial que le obligaba a colaborar. El límite de la disputa fue tal que Apple estuvo a punto de tener que ceder el código fuente de iOS.
Nadie esperaba el fin pacífico de esta batalla judicial, hasta que el FBI anunció el pasado lunes que había conseguido acceder al iPhone 5c sin la ayuda de Apple. Este hecho cambiaba totalmente los acontecimientos hasta el momento.
El comunicado del FBI era claro: “Nuestra decisión de poner fin al litigio está basada en el solo hecho de que, con la asistencia de una tercera parte, hemos sido capaces de desbloquear el iPhone sin comprometer la información que contiene el teléfono”. Así, el gobierno americano anunciaba que retiraba la demanda contra Apple. ¿Cómo reaccionaría la compañía ante este cambio?
”Apple cree profundamente que las personas en Estados Unidos y en todo el mundo merecen protección de datos, seguridad y privacidad. Sacrificar uno por el otro solo pone a las personas y los países en mayor riesgo. Este caso plantea cuestiones que merecen un debate a nivel nacional sobre nuestras libertades civiles, y nuestra seguridad y privacidad colectiva. Apple mantiene su compromiso en participar en esta discusión”.
Solo unas horas después del anuncio del FBI, Apple ha declarado que no sabía cómo los investigadores habían logrado entrar en el polémico iPhone. Recalcando la importancia de la privacidad de sus usuarios, Apple ha anunciado que seguirá incrementando la seguridad de sus dispositivos. Aunque, sin embargo, también ha defendido que seguirá ayudando en todo lo posible en las investigaciones.
Con este discurso, Apple hace hincapié en desarrollar un debate público entre la seguridad y la privacidad, lo que parece un desafío para un gobierno estadounidense que ya ha dejado claro que las fuerzas de seguridad deben tener a los dispositivos. Este debate público ya ha tenido lugar a raíz del conflicto entre Apple y el FBI, y la privacidad de los ciudadanos parece haber ganado.
La importancia de este debate no se limita solo a Estados Unidos, sino que ya es mundial. Los gobiernos pretenden acceder a la información privada de los ciudadanos a toda costa, mientras las compañías tecnológicas se resisten. ¿Piensas que la protección de los datos debe prevalecer ante la seguridad?