SpaceX es una empresa norteamericana fundada en 2002 y dedicada a la fabricación de aeronaves para el transporte espacial. En 2008, esta empresa consiguió firmar un importante acuerdo con la NASA para el Servicio Comercial de Suministro a la Estación Espacial Internacional.Hasta nuestros días, la empresa norteamericana se encontraba entredicho por su obsesión en conseguir aterrizar un cohete en el mar sobre un objeto en movimiento.
Este empeño, le había llevado a perder grandes cantidades de dinero y ya eran varios expertos los que consideraban si su contrato con la agencia espacial estadounidense seguía siendo rentable. Sin embargo, después de cuatro intentos, SpaceX ha conseguido aterrizar por primera vez en la historia un cohete sobre una barcaza que se encontraba en medio del mar.
¿Por qué es tan importante este hecho?
El cohete Falcon 9 se pusó en órbita a las 4.43 hora local (20.43 GMT) desde Cabo Cañaveral (Florida), con el objetivo de llevar suministros a la Estación Espacial Internacional. Horas más tarde, una fase del cohete aterrizaba en una barcaza en el medio del mar suponiendo esto, un éxito para toda la comunidad científica.
Este hecho no tiene precedente alguno en la historia aeroespacial. Hay que decir que en 2015, SpaceX ya logró aterrizar un cohete en Cabo Cañaveral pero según afirman los expertos, la dificultad de este logro es mucho menor si lo comparamos con el de ahora.
Tal y como han explicado científicos de la empresa de aeronaves, conseguir aterrizar un cohete que viene de regreso de una misión espacial supone que se puedan reciclar los materiales de esa nave para otras misiones, ahorrando unos costes enormes en la fabricación de otro nuevo cohete. Hablamos de costes de materiales, de combustible, de tiempo o de personal. Factores que resultan fundamentales en la carrera espacial.
Si bien es cierto que se consiguió aterrizar un cohete en Cabo Cañaveral, el hecho de tener que llevar la aeronave de nuevo hasta lugar donde despegó en un primer lugar, suponía un gran coste de combustible y unas maniobras muy complejas que podrían comprometer la seguridad el personal adscrito a una misión concreta y la rentabilidad de la organización. Sin embargo, conseguir aterrizar un cohete en cualquier lugar del océano, otorga un gran margen de maniobra económica y de seguridad en sucesivas misiones.
Con este hito, se da un paso adelante también en el turismo espacial y en los viajes tripulados hacía cualquier lugar cercano a nuestro planeta, ya que si se consigue controlar por completo la mecánica del despegue, y sobre todo, del aterrizaje de este tipo de aeronaves y se logra, por otro lado, abaratar los costes para su fabricación, podríamos ver muy pronto que estos viajes comienzan a ser una realidad.
¿Has visto el vídeo del aterrizaje del Falcon 9?
