Después de todo el alboroto que se formó alrededor de este tema, en el que al principio se dijo que sería gratis durante todo el año, para luego reducir ese período a 90 días, se ha confirmado este mediodía que el límite no será este, y que la decisión tomada y anunciada por Günther Oettinger, Comisario Europeo de Economía Digital y Sociedad, es que no exista límite por días, aunque sí que habrá ciertas medidas que eviten el abuso del servicio.
Todos salen contentos
El plan de eliminar cualquier cargo extra a nuestra tarifa roaming a partir del próximo 15 de junio de 2017 sigue en pie, y se ha conseguido al mismo tiempo que se mantiene contentas a la operadoras, que lógicamente tenían la preocupación de que al ofrecer esto de forma gratuita, mucha gente abusase de ello, cosa que no sería tan rara conociendo la condición humana.
Para que esto no suceda se han planteado ciertas herramientas que permiten a la operadoras tener controlado hasta qué punto un usuario del roaming está realmente acatando las pautas que lo definen. Recordamos que el hecho de que el roaming pase a ser gratuito es para que aquellas personas que se desplazan con frecuencia por la unión europea, por trabajo por ejemplo, no tengan que pagar una cantidad extra que se convertiría en excesiva a la larga.
Lo que se ha acordado es que las operadoras podrán aplicar a los clientes un principio de residencia que controlará si al cliente debe o no aplicarsele una tarifa roaming, así como también las operadoras podrán avisar al cliente en caso de que sobrepase los límites establecidos y consideren que el mismo está abusando del servicio, al mismo tiempo que el cliente podrá justificar el por qué de ese consumo.
Los casos en los que se considerará abuso son, entre otros:
Cuando nuestra línea de casa tenga un tráfico mucho menor que la del móvil, se considerará que te estás aprovechando del roaming gratuito.
Si das de alta varias tarjetas SIM en el extranjero y se dan cuenta, se considerará abuso.
Por último, también cuando se detecte inactividad prolongada en una SIM dedicada mayormente, aunque no exclusivamente, para roaming
En el caso de que se detecte abuso, los cargos que las operadoras podrían aplicarnos por proposición de la Comisión Europea serían de 4 céntimos por minuto de llamada, 1 céntimo por SMS, y 0,0085 euros por cada MB de nuestra tarifa consumido. Realmente poco.
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Parece que es la mejor solución, y la que más se acerca al ideal del Mercado Único, uno en el que los clientes que lo necesiten puedan gozar de la despreocupación de su consumo de datos en el extranjero al mismo tiempo que las operadoras telefónicas tienen las herramientas que necesitan para que no se convierta en un desmadre.
