Cuando parecía que las cosas no podían ir peor para Samsung, la compañía ha recibido otro duro golpe. Oculus acaba de retirar el soporte de Gear VR para Galaxy Note 7 tras ver conocerse hace pocas horas que Samsung ha finalizado de forma oficial la producción y venta de este terminal en todo el mundo.
Así lo conocemos gracias a Engadget, que confirma que la compañía de realidad virtual Oculus ha decidido acabar su relación con el Galaxy Note 7. Oculus ha realizado una actualización de última hora para su aplicación Gear VR para impedir que esta app esté disponible para el mencionado modelo de Samsung.
A partir de ahora cuando los dueños de un Galaxy Note 7 quieran acceder a Gear VR verán el siguiente mensaje: “La seguridad del cliente es la máxima prioridad de Oculus. Hemos eliminado el soporte en todos los dispositivos Note 7. Hasta nuevo aviso, los dispositivos Note 7 no serán compatibles con Gear VR. Para más información deben ponerse en contacto directamente con Samsung”.
Oculus ha tomado esta decisión con el objetivo de proteger la salud de sus usuarios. Naturalmente, las gafas de realidad virtual pueden causar un gran daño a los clientes en caso de que su Galaxy Note 7 explote. La decisión de Oculus todavía no ha sido confirmada por la propia compañía, pero sí ha sido reportada por varios usuarios que han tenido que actualizar sus dispositivos.
El riesgo al usar el Samsung Galaxy Note 7 debe ser máximo cuando vemos que Oculus no ha ofrecido a los usuarios la posibilidad de decidir si quieren o no seguir usando su dispositivo con dicho móvil.
Mal momento para Samsung
La decisión de Oculus ha significado otro duro golpe para Samsung. La firma surcoreana ve cómo su crédito desciende de forma imparable tras los graves casos de incendios protagonizados por sus Galaxy Note 7. Ayer conocíamos que la compañía decidía suspender su producción tras las recientes explosiones, pero hoy ha dado un paso más allá.
Como mencionábamos anteriormente, Samsung ha parado de forma definitiva la producción y venta de su producto, devolviendo de forma íntegra el dinero a los dueños de Galaxy Note 7. Este problema, más la decisión de Oculus de dejar de darle soporte a su móvil en Gear VR, quedan a Samsung en una situación extrema de la que va a ser muy difícil salir.