El 2 de agosto de este 2016 Samsung sorprendía nos sorprendía a todos presentando el Galaxy Note 7, el nuevo móvil de la marca que llegaba para impresionar. Sin embargo, el Galaxy Note 7 ha protagonizado las noticias durante los últimos días por razones inesperadas. Varios dispositivos de este modelo se han incendiado, por lo que Samsung se ha visto obligada a suspender la producción.
Samsung ha tomado esta decisión tras ver cómo sus Galaxy Note 7 no eran tan seguros como parecía. Como leemos en Andro4all, las explosiones han llevado a Samsung a parar por el momento la producción de unos móviles que están aumentando el desprestigio de la firma. La información procede de la agencia de noticias coreana Yonhap, aunque Samsung no ha confirmado por ahora este parón en la producción.
Los problemas para Samsung comenzaron cuando varios clientes informaron a la compañía sobre las explosiones que habían sufrido sus Galaxy Note 7. Samsung se vio obligada a reemplazar un gran número de productos por la misma razón: los Galaxy Note 7 salían ardiendo pocos días después de iniciar su uso. Ante el gran número de quejas, Samsung actuó rápidamente y quitó del mercado 2,5 millones de terminales peligrosos.
La tranquilidad para Samsung no fue muy duradera, ya que aquellos Galaxy Note 7 considerados como “seguros” que habían sido dados a los clientes afectados no eran tan fiables como parecían. Durante los últimos días los medios de comunicación han informado de hasta 8 casos donde los terminales de sustitución han salido ardiendo en países como Estados Unidos, Corea del Sur y Taiwán.
Estos casos demuestran que Samsung no había solucionado el problema como se esperaba y que el peligro sigue en el mercado. Las nuevas explosiones han provocado que dos de los grandes operadores de Estados Unidos, T-Mobile US y AT&T, hayan decidido dejar de vender los terminales de sustitución de Galaxy Note 7. Ya han tenido lugar en Estados Unidos cinco casos de incendio y no quieren que se vuelvan a repetir.
Ante las nuevas noticias, Samsung ha publicado un comunicado con el objetivo de tranquilizar tanto a operadoras como usuarios:
”Samsung entiende la preocupación de las operadoras y sabe lo que pueden estar sintiendo los consumidores después de haber conocido los recientes informes sobre los problemas con los nuevos Galaxy Note7. Seguimos adelante y tratamos de investigar lo más rápido posible los nuevos casos para tratar de determinar una causa, con el fin de compartir los resultados lo antes posible. De hecho, estamos en estrecho contacto con la CPSC durante todo este proceso. Si llegamos a la conclusión de que existe algún problema de seguridad, trabajaremos rápidamente para tomar las medidas oportunas. Queremos asegurar a todos nuestros clientes que nos tomamos muy enserio cada uno de los informes recibidos y que apreciamos mucho su paciencia mientras estamos trabajando en ello.”
Parece que Samsung todavía no tiene muy claro el problema que provoca estas explosiones en los Galaxy Note 7 y por ello ha decidido suspender de momento su producción. Tendremos que esperar para ver cómo la compañía soluciona un error que le puede costar muy caro.