Ha llegado octubre, y con ello el anuncio de los ganadores del premio más loable del mundo: los premios Nobel. Estos premios, que llevan el nombre de su principal impulsor, se entregan desde 1895 y reconocen a personas o instituciones que hayan llevado a cabo investigaciones o descubrimientos en beneficio del conjunto de la humanidad.
Hasta ahora, los premios ya entregados este año han sido:
El premio Nobel de Medicina o Fisiología: Yoshinori Ohsumi
El pasado lunes a las 11:30 se anunció que el japonés Yoshinori Ohsumi era el galardonado de este premio por su investigación sobre los mecanismos de la autofagia celular.
Cabe destacar que este premio ha sido gracias a una investigación anterior. Concretamente, en los 50, cuando el científico belga Christian de Duve descubrió los lisosomas y se dio cuenta de que estos orgánulos eran capaces de “comerse” proteínas, carbohidratos, lípidos y otros deshechos de las células para convertirlos en materia útil, como podemos leer en BBC Mundo.
Este hallazgo le valió en 1974 el premio Nobel de esta categoría y acuñó el nombre de autofagia (que proviene del griego y significa “comerse a uno mismo”) a los procesos de los lisosomas.
No fue hasta la llegada de Yoshinori que no se descubrió, gracias a la investigación con células de levadura de pan, los genes de la autofagia, y se dio cuenta de que eran similares a los de los humanos. Así, se permitió conocer que la degradación y el reciclaje de estos componentes de otras células es vital para que se cumplan determinadas funciones fisiológicas.
También, descubrió que este reciclaje de componentes dañinos o tóxicos permitía producir nuevas proteínas y eliminar restos de bacterias y virus tras una infección. Si la autofagia falla, se pueden producir enfermedades como el Parkinson, el Alzheimer, el cáncer o la diabetes de tipo 2.
El premio Nobel de Física: David Thouless, Duncan Haldane y Michael Kosterlitz
Tres británicos han sido los galardonados, el pasado martes, gracias a sus investigaciones acerca de “los descubrimientos teóricos de las transiciones de fase topológica y fases topológicas de la materia”. Es decir, gracias a sus avances en en el estudio de los cambios de estado a escalas microscópicas.
Durante un determinado tiempo, la comunidad científica creyó que las fluctuaciones térmicas, como leemos en El País, destruían cualquier tipo de orden en el mundo 2D, incluso en el cero absoluto, así que sin fases ordenadas no eran posibles las transiciones entre ellas.
Cronológicamente ocurrió lo siguiente:
En los 70, Thouless y Kosterlitz investigan conjuntamente y llegan a una nueva compresión de estas fluctuaciones.
En los 80, Thouless y Dunkan desarrollan métodos teóricos para describir fases de la materia que se salen de la simetría. Con estos métodos se explicó el comportamiento bidimensional de los gases electrónicos empleado conceptos topológicos.
Estos avances repercutirán de forma excepcional en la ciencia de materiales. También permitirá avanzar en la computación cuántica topológica.
El premio Nobel de Química: Jean-Pierre Sauvage, Fraser Stoddart y Bernard Feringa
Un francés, un británico y un holandés han sido los galardonados, el pasado miércoles, gracias a la invención de las máquinas moleculares, las más diminutas del mundo.
Para hacernos una idea de su tamaño, tan solo hay que decir que son mil veces más delgadas que un pelo, tal y como informa La Vanguardia. Estas pequeñas máquinas son moléculas que pueden realizar determinadas acciones controladas si se les suministra una determinada energía.
Estas máquinas se emplearán en el futuro para desarrollar nuevos materiales, sensores y dispositivos de almacenamiento de energía, como justifica la Academia de Ciencias Sueca.
¿Qué te han parecido los laureados y sus investigaciones? Los próximos premios que quedan por desvelar son el de la Paz este mismo viernes, el de Economía, el próximo lunes, y el de Literatura, aún sin fecha.