En la actualidad, más del 70% de todos los televisores LED vendidos en el mundo son fabricados por diez de las más importantes marcas del mundo; es a todas luces un mercado muy competitivo, lo que es muy ventajoso para nosotros los usuarios.
Lanzados por primera vez en 2009, el desarrollo de los televisores con tecnología LED ha recorrido un largo camino para llegar hasta hoy. Hace casi una década, ni siquiera se conocían con ese nombre. Fue Samsung el primero en denominarlos de esa manera, y para entonces las resoluciones solo llegaban hasta los 1080p, o mejor dicho, apenas FullHD.
Presente FullHD
Hoy en día, las principales marcas del mundo tienen un participación en este mercado; por ejemplo, Samsung, LG y Sony representan el 40% de todas las ventas de este tipo de televisores en todo el mundo.
No obstante, los fabricantes chinos crecen a pasos agigantados mientras aumentan sus participaciones en los mercados de Estados Unidos y Europa. La avanzada de marcas no tradicionales ha sido beneficiosa para los usuarios, que han visto cómo el precio de los televisores LED se ha hecho más amigable para sus bolsillos.
Para hacernos una idea, veamos el caso de Hisense. Este fabricante chino ocupa el cuarto puesto en participación del mercado de LED TV con 5,6%, por detrás de Sony (6,9%). Tiene trece líneas de producción en su país de origen, pero además, cuenta con plantas de ensamblaje en México, Egipto, Brasil, Francia, Sudáfrica, y otras naciones. Quizá su nombre no os sea muy conocido, pero desde 2015 obtuvo los derechos para comercializar sus productos bajo la conocida marca Sharp.
Futuro en UltraHD
Esto nos abre un cúmulo de oportunidades que evolucionan a la velocidad de la luz. En los anaqueles de las tiendas ya se ofrecen comúnmente LED TV de Ultra Alta Definición (4K), e incluso, varios fabricantes han adelantado sus planes de introducir modelos de hasta 8K en los próximos años.
De nuevo, quizá asuste escuchar el precio de estos televisores, pero no olvidemos que los modelos FullHD que hace casi diez años se vendían por encima de los mil euros, hoy con apenas un par de cientos podemos llevarlos a casa.
