¿Nunca has visto sangre a la luz de la luna? Parece negra.
Hoy he aullado. A veces el mundo sí es un pañuelo. Un pañuelo sucio y arrugado que debes tirar al cubo de basura emulando a Larry Bird. Ahora resulta que estamos de parto. Son gemelos. Aún no se escuchan sus gimoteos, pero llorarán; porque la claridad da miedo. Dos series. El universo de Thomas Harris tiene dos nuevas estrellas de papel celofán. En Estados Unidos es inconcebible no exprimir un éxito, hay que extraer la última gota del jugo, son vampiros que chupan la sangre para mezclarla con champagne. Quid pro quo. No es casualidad, ni algo excepcional, que allí coincidan dos proyectos con un mismo personaje o que graviten sobre una misma idea. Ocurrió con Robin Hood en los 90, y ahora con Sherlock Holmes, por poner sólo dos ejemplos de los muchos que hay.
Hannibal Lecter es uno de los especímenes más inquietantes que me he encontrado. Más que Julián Muñoz. Su inteligencia bestial y su crueldad refinada traspasan pantallas, aunque no sean en 3D. Aún recuerdo perfectamente cómo lo conocí de verdad. Mis ojos paseaban línea por línea, atónitos, explorando sus crímenes inhumanos. Cada noche me acomodaba en el sofá, bebiendo un Chianti, preparado para sobresaltarme cada dos por tres, para sentir escalofríos, para cerrar el telón del día, completamente turbado. No me lo creía, esto no puede ser real. Pero los periódicos me abren los ojos días tras día.
Nunca olvidaré al corrupto Krendler, bajo el efecto de las drogas, degustando su propio cerebro salteado en mantequilla y hierbas, después de que Lecter le haya practicado una craneotomía. Clarice Starling contempla la escena horrorizada. Yo devoré esas páginas escritas por Harris, hace muchos años, sujetando el libro con una mano y acariciándome la cabeza y el pelo sin parar, con la otra. Espero que no te guste navegar por Internet mientras cenas cabezas de cordero al horno. La grosería debe ser castigada.
Hannibal es un seductor culto y elegante; de mirada amenazadora. No es el estilo de Cary Grant o Brad Pitt, por supuesto, pero su poder de atracción es innegable. Cuando aparece en pantalla, te callas y no puedes dejar de mirar qué hace. No importa nada más, el resto queda difuminado, sólo te fijas en él. Anthony Hopkins siempre será el psiquiatra antropófago que de vez en cuando nos visita en pesadillas. Hannibal el caníbal.
Thomas Harris publicó El Dragón Rojo en 1981. Cinco años después, se llevó al cine con más pena que gloria. Michael Mann fue el elegido para dirigir Manhunter, el cazador de hombres. Pero hubo que esperar a 1991, para que saltaran las taquillas, para crear el mito. El silencio de los corderos de Jonathan Demme es una película inolvidable. No es una picadura de mosquito. Deja marca. Hannibal y el Dragón rojo, intentaron repetir el éxito, pero se quedaron a medias. Y no hay peor pecado. En el año 2007, se intentó por última vez. Hannibal, el origen del mal. Peter Weber narra los primeros años de vida del asesino en serie, con guion del propio Thomas Harris. Ganó dos Razzies, incluyendo el de peor precuela o secuela. Te doy permiso para verla, pero será bajo tu responsabilidad.
Sabíamos que la cadena del pavo real, la NBC, había encargado 13 capítulos para una serie centrada en Hannibal Lecter. La contrataron sin tener siquiera un piloto filmado, fue escuchar el nombre de Hannibal, y dibujarse el símbolo del dólar en los ojos de los directivos. El piloto será dirigido por David Slade, responsable del piloto de Awake, que por cierto, acaba de ser cancelada. No es una premonición, ¿verdad?. Slade no sólo se dedicará a dirigir sino que también será el productor ejecutivo. No obstante, el verdadero motor de esta idea es Bryan Fuller (Criando malvas y Dead Like Me).
Fuller tiene en mente siete temporadas. ¿Dará para tanto? ¿La cancelarán antes, por baja audiencia? La serie describirá los años anteriores a su encarcelamiento, cuando no estaba obligado a pintar de memoria Il Duomo de Florencia, si quería una ventana al mundo. Tendrá una estructura procedimental. ¿Qué es eso? Un capítulo, un caso. Principio y fin en menos de 60 minutos, como CSI o House. Evidentemente, también habrá una trama horizontal, un chicle que una los capítulos. La idea que ha impulsado esta serie procede de la primera novela. Lecter colaboraba con el agente del FBI, Will Graham, cuando aparecía un psicópata o un asesino, de mente demasiado retorcida. Era uno de los nuestros, uno de los buenos. Por el momento se desconoce quien dará vida a Lecter, pero ya está decidido quién será Will Graham: Hugh Dancy.
Como Hannibal dijo en las películas, ellos tienen muchas cosas en común y vamos a explicar lo que eso significa a lo largo de las dos primeras temporadas. No queremos apresurar las cosas.
En una reciente entrevista, Fuller desmenuzó parte de la trama:
Nuestro Hannibal parecerá más feliz. Él no será abordado como un villano. Si la audiencia aún no lo conociera, no podrían imaginarse las cosas que él es capaz de hacer. Hemos escogido seguir el principio de suspense, de Alfred Hitchcock: mostrar a la audiencia la bomba que está debajo de la mesa y dejarlos sin saber cuando va a explotar.
Entonces el público ya sabe quién es Hannibal, librándonos de tener que explicar su lado malvado. Así, tenemos la posibilidad de alterar su legado, entregando a la audiencia más cambios.
Fuller sabe que los fans de los libros serán críticos con la serie, y quiso tranquilizarlos:
La serie estará plagada de tramas y roles directamente extraídos de los libros de Harris aunque con algún cambio sustancial como, por ejemplo, el del sexo del doctor Alan Bloom, que ahora pasa a ser Alana Bloom.
Qué miedo. Se empieza por un trapicheo…
¿Y la otra estrella de papel celofán? Lifetime, la cadena de Anatomía de Grey, ha anunciado que prepara otra serie. Clarice. ¿Necesito darte más detalles, para que sepas de qué va? Una joven agente del FBI, Clarice Starling, se gradúa en la Academia de Quantico. ¿Qué tiene de especial Clarice? ¿Qué aliciente verá el público, si Hannibal se esfuma de la historia? ¿Será suficiente, para que no parezca una serie policíaca de andar por casa?
¿Cuál de las dos series promete más? ¿Verás alguna de las dos? ¿Qué actores piensas que podrían interpretar a estos personajes? ¿Cuál crees que podría ser la opción más estrambótica? ¿Qué te parecen Antonio Resines como Hannibal Lecter y Soraya Sáenz de Santamaría como Clarice Starling? ¿Quién interpretará al exquisito y carismático Hannibal Lecter? ¿Estará a la altura? ¿Nos hará olvidar a Anthony Hopkins? ¿Te parece oportunista la estrategia de Lifetime? ¿Siguen gritando los inocentes corderos, cuando apagas la luz?