No cabe duda de que el sistema de patentes actual es un verdadero infierno que no hace más que generar litigios innecesarios, desperdiciar en abogados dinero que debería usarse para innovar y generar polémicas innecesarias. Las guerras en este campo han sido muy duras, llegando Samsung a ser sentenciada a pagar 1.000 millones de dólares de indemnzación a Apple. Ahora bien, ¿qué ocurre cuándo el denunciado es un particular o una pequeña empresa, que además está dispuesta a compartir su trabajo con el resto del mundo mediante una licencia open source? Se trata, sin lugar a dudas, de una gran injusticia.
Pues parece que la empresa que dirige Larry Page se da cuenta de lo importantes que son este tipo de licencias para el desarrollo tecnológico, y que muchas compañías que se basan en un modelo abierto acaban teniendo que hacerse con más y más patentes para defenderse. Por eso Google se ha comprometido a no utilizar sus patentes para demandar a ningún usuario, distribuidor o desarrollador que use software libre. Eso sí, por ahora el compromiso se limita a una serie concreta de patentes, que la marca espera que con el tiempo se vaya ampliando.
Por otro lado, la empresa del buscador tiene la esperanza de que esta iniciativa resulte une ejemplo a seguir para el resto de la industria, y de esta forma el entorno del open source pueda disfrutar de mayor tranquilidad legal y centrarse en traernos nuevos productos interesantes. La verdad es que debemos aplaudir la estrategia de Google y desear que más grandes compañías del software se le unan, aunque no haya muchas que tengan un compromiso tan claro con este mundo. En cualquier caso, seguiremos pendientes de cualquier reacción que este inesperado movimiento pueda producir.
¿Qué te parece la idea? ¿Interesante y bondadosa, o una necesidad para que la industria no acabe desangrada por los conflictos de patentes?
Fuente | Google Open Source Blog
