Escuela 2.0: redes sociales y su aplicación en la educación

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El incremento de usuarios en las redes sociales ha abierto un canal de interacción alternativo a los espacios que tradicionalmente se utilizaban para la formación académica. Si bien existen plataformas virtuales exclusivas para la enseñanza -como Moodle o Blackboard- algunos han centrado su atención en las sencillas interfaces de Facebook y Twitter para compartir materiales educativos y enriquecer las experiencias de aprendizaje de un colectivo. La principal fortaleza: el dominio de los participantes sobre la herramienta, su debilidad: el riesgo de que se desvirtúe su finalidad.

Facebook

En una propuesta formativa, la comunicación y retroalimentación entre los participantes conserva un carácter fundamental para la adquisición de nuevos saberes. Mientras en un ambiente presencial se puede interactuar cara a cara, responder inmediatamente y observar las reacciones de nuestro interlocutor, en un entorno virtual se establecen mecanismos para el intercambio de información, contrastar puntos de vista y desarrollar habilidades de aprendizaje autónomo.

Sin duda es un reto docente llevar una adecuada administración de un grupo virtual creado para fines educativos, toda vez que hay una cantidad importante de distractores que conllevan el riesgo de que se pierda el rumbo y los objetivos iniciales, por ello se necesita de un sólido compromiso para el trabajo colaborativo y un alto nivel de confianza de los integrantes de la comunidad.

Facebook, Twitter y Youtube La función social que la mayoría de las personas de damos a las redes sociales, puede tener un valor agregado cuando incluimos elementos cognitivos, es decir cuando revaloramos la interacción que prevalece con nuestros contactos y reconocemos que las publicaciones que compartimos son una fuente importante de información y de aprendizaje cotidiano. Además debemos tomar en cuenta que las redes tienen presencia en todos los dispositivos móviles inteligentes, lo que le da un carácter de inmediatez y conexión permanente.

Para todos los que decidan integrar plataformas tecnológicas como Facebook y Twitter en su práctica docente lo más importante es conocer todos sus atributos, características y limitaciones para saber administrar el curso y diseñar un programa de actividades orientado cubrir los contenidos y a su vez, adecuándose a las condiciones y posibilidades que la herramienta provee.

La introducción de elementos innovadores en la educación se debe tomar como una experiencia enriquecedora para los alumnos, no basta con saber que son herramientas populares, a las que todo el mundo tiene acceso y que por esta razón será sencillo integrarlas a la práctica educativa, sino ser conscientes de los aspectos positivos que conlleva y aprovecharlos para obtener mejores resultados.

Archivado en Aprendizaje, Educación, Facebook, Internet y redes sociales, Twitter
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