Hace ya tiempo de este tema, pero una de las filtraciones de información más sonadas y graves fue la que sufrió Sony en sus servidores de los servicios de PlayStation. Apple también tuvo problemas (de mucho menor alcance) hace poco, y yo ya no me sorprendo cuando me llega un correo de algún sitio web en el que me registré hace años avisándome de que cambie mi contraseña porque sus bases de datos se han visto comprometidas. La seguridad informática representa un tema muy serio, pero eso no evita que nos cause disgustos, como el que os traemos hoy.
Al parecer, han hackeado a Vodafone, y los datos personales de unos dos millones de cliente fueron robados, incluyendo sus cuentas bancarias. Por suerte, no se han extraído números de tarjetas de crédito, de teléfono, PIN o contraseñas, pero de todas formas se aconseja tener cuidad con posibles ataques de pishing. La operadora considera esta intrusión “altamente sofisticada” y cree que sólo algún empleado con conocimiento de sus sistemas más seguros puede haberla realizado. De hecho, ya se ha identificado y puesto a disposición policial a un sospechoso. Para nuestra tranquilidad, la acción no resulta un problema para usuarios de fuera de Alemania y, en cualquier caso, los afectados ya han sido contactados.
La verdad, no se trata de una publicidad muy buena para una empresa que, a día de hoy, preferiría estar en boca de todos por el despliegue de su red 4G. Desde luego, cada vez resulta más difícil mantener nuestros datos a salvo, sobre todo considerando que hay gobiernos que son los primeros interesados en acceder a nuestra información confidencial. Esperemos que todo este asunto haya quedado en un simple susto, y el culpable reciba un castigo acorde al mal uso que pretendiera dar a todos esos detalles privados de los clientes.
¿Qué opinas del tema? ¿Estás preocupado por tu seguridad online, o crees que estos casos son inevitables en un mundo tan dependiente de la tecnología?