Parece evidente que en el próximo CES 2014 Samsung va a presentar sus primeros terminales con el sistema operativo Tizen, con un poco de retraso respecto a los planes iniciales. Este software se trata del heredero de Bada, al que Intel ha aportado su experiencia con MeeGo. Con dos empresas tan potentes detrás, uno espera un éxito mayor que el que disfrutaron sus antecesores, y el fabricante surcoreano de smartphones tiene muy buenas razones para apoyar con fuerza la aventura. También la compañía de semiconductores debería estar interesada… siempre que convenza a Samsung para que emplee sus chips, algo que me parece complicado.
Por parte de Samsung, está muy claro que tendría que temer a Google. Posee el control de Android, el sistema operativo que ha llevado al éxito a la familia Galaxy. Sorprendería que cerrase el código de próximas versiones de la plataforma, pero no se sabe lo que puede pasar a largo plazo, sobre todo considerando que la marca del buscador es propietaria de una marca como Motorola, cada vez más competitiva. Y Microsoft ha comprado Nokia para reforzar la posición de Windows Phone, por lo que quizá Google cambie de estrategia en unos años, dejando a su socio surcoreano en la estacada.
Francamente, no tengo claro que Samsung desee abandonar Android en breve, porque no podría, por mucho que le agradara la idea. Pero eso no significa que no empiece a trabajar en una alternativa para el caso de que surgiera un imprevisto. Si la marca se esfuerza, sus elevadas ventas pueden conseguir que pronto se genere un ecosistema de aplicaciones grande alrededor de Tizen. Representará una plataforma, además, diseñada de acuerdo a sus necesidades e intereses, en lugar de los de la multinacional de Larry Page. Sin duda, vale la pena ir preparando el camino, quizá con la mirada puesta en una migración total dentro de algunos años.
En definitiva, no creo que tenga sentido pensar en que Samsung va a ir dejando Android el año que viene (aunque estratégicamente pudiera resultar tentador), sólo pondrá las bases de una alternativa. Que puede resultar de importancia clave si Google cambia de actitud respecto a sus socios en el futuro, pero que también tendrá un gran valor como una plataforma que se adapte específicamente a las necesidades de los dispositivos de los coreanos, y que pueda ofrecer una experiencia superior a la del robot verde con el paso del tiempo. Desde luego, creo que Samsung hace muy bien en tomar este camino, aunque no sabemos todavía cómo acabará.
¿Qué opinas del tema? ¿Piensas que Tizen tiene futuro, o crees que no va a volverse capaz de alcanzar el nivel de los grandes sistemas operativos del mercado?