Ahora mismo, la exploración espacial se encuentra en un punto muerto: las misiones tripuladas fuera de nuestro planeta se dirigen a la Estación Espacial Internacional, la Luna ya no tiene mucho interés, y existen varias iniciativas para llevar humanos a Marte, pero no parece que se vayan a materializar en breve. En este momento, las mayores alegrías nos las están dando los rovers exploradores. De hecho, China mandó uno hace poco a la Luna, lo que tal vez vuelve a azuzar la carrera espacial, y consiga provocar que los países se enfrenten por conseguir los mayores logros. Mientras tanto, habrá que mirar al pasado.
Y es que se va a subastar una pieza única: una de las cámaras que se envió a la Luna a sacar fotos. Sólo una de estas Hasselblad de 70 milímetros volvieron a nuestro planeta, el resto se abandonaron para evitar un peso inútil. En concreto, la que nos ocupa se utilizó en la misión Apolo XV en 1971, y el astronauta Jim Irwin capturó 299 imágenes con ella. La cámara es propiedad de un coleccionista italiano, y se va a poner a la venta el próximo 21 de marzo en Viena. Se asegura la autenticidad del producto, aunque no se aportan demasiadas pruebas que la confirmen más allá de toda duda.
Se espera alcanzar un precio final de entre 150.000 euros y 200.000 euros por el objeto, aunque no sería el primer caso de una subasta en la que las cifras se disparan. Teniendo en cuenta que catorce unidades han ido a la Luna y sólo esta ha vuelto a la Tierra, la verdad es que se trata de una oportunidad única para un amante de la historia de la carrera espacial que disponga de un presupuesto abultado. Desde luego, no se verán muchas ocasiones como estas, seguro que el que consiga la cámara no va a deshacerse de ella con facilidad.
¿Qué opinas del tema? ¿Esta pieza vale 200.000 euros, o te parece que hablamos de una cifra desorbitada?