Cuando Megaupload fue cerrado por presiones del gobierno de los Estados Unidos, muchos de los servicios que competían con él fueron cediendo a las deseos de los lobbies del copyright, para no acabar de igual manera. Aunque sus creadores han vuelto con MEGA, la descarga directa de archivos no se ha recuperado de este duro golpe. Y parece que lo va a tener bastante difícil, porque se sigue luchando contra la piratería a base de acciones legales… que a veces sorprenden por lo agresivas que resultan, y por las sentencia que se dictan, que nos hacen pensar que los jueces encargados no conocen mucho el tema sobre el que deciden.
Y es que hoy sabemos de una condena muy peculiar contra Fileserve. La empresa de almacenamiento online fue demandada por el estudio independiente responsable de American Cowslip, que consiguió una indemnización de 869.500 dólares, más 22.960 dólares en costas judiciales. La cifra podría parecer razonable en el caso de otras producciones, pero es que la película en cuestión recaudó 68.000 dólares mientras estuvo en cartelera. Lo que demuestra claramente que la forma en la que se calculan las pérdidas que ocasiona la piratería no tiene ningún sentido y se basa en la ilógica premisa de que quien se descarga un contenido lo hubiera comprado a su precio completo de no haberlo obtenido de otro modo.
No cabe duda de que American Cowslip ha rentabilizado su producción gracias a su paso los tribunales. De todas formas, no es la primera vez que vemos casos de hipocresía respecto a este tema. Desde luego, tengo claro que la forma de luchar contra este problema pasa por la educación y la adaptación de las industrias. Este tipo de condenas pueden provocar un efecto disuasorio, pero considero probable que vayan surgiendo otras alternativas que impidan controlar la distribución de contenidos no autorizada.
¿Qué opinas del tema? ¿Crees que esta indemnización no tiene sentido, o que debe cundir el ejemplo?