Ya os he hablado de cómo es posible vivir prácticamente sin piratería si uno está convencido de que el trabajo de los creadores debe ser recompensado. Podría parecer que los Estados Unidos piensan lo mismo, a la vista de las medidas que toman para defender la propiedad intelectual, como cuando se ejecutó el sonado cierre de Megaupload, que hace no mucho ha renacido bajo el nombre de MEGA. Pues bien, parece que no todas las instituciones del país le dan tanta importancia a respetar las obras ajenas, sobre todo cuando eso toca a sus presupuestos, aunque resulten de lo más amplios.
El Ejército de los Estados Unidos ha llegado recientemente a un acuerdo por el que pagará 50 millones de dólares para evitar ir a juicio. El tema en cuestión que ha causado el problema se trata de un software de monitorización personal de Apptricity para el que compró licencias en 2004 y 2009. Pero, una vez caducaron, se siguieron usando los programas en 100 servidores y 9.000 dispositivos. Es más, la institución intentó realizarles ingeniería inversa para evitar posteriormente problemas legales, encargándosela a una tercera empresa. El Washington Post calcula que el dinero que se ha ahorrado por esta piratería asciende a 180 millones de dólares en total.
Si se han pagado 50 millones de dólares como indemnización, está claro que al Ejército de los Estados Unidos le ha salido más que rentable la jugada. Un claro ejemplo de que el crimen compensa cuando formas parte de las esferas de poder. Al final, tantas medidas anti piratería contra el ciudadano poco van a lograr hacer si organismos de este tipo dan mal ejemplo. La verdad, veo triste que Apptricity se conformara con tan poco dinero, pero seguramente no podría permitirse iniciar una interminable batalla judicial contra un institución tan grande e influyente, así que la decisión parece razonable.
¿Qué opinas de este tema? ¿Se trata de un caso de doble moral, o más bien una prueba de la corrupción del sector público?