La canción Gangnam Style del rapero PSY representó un éxito mundial, e incluso el videoclip llegó a a volverse el vídeo más visto de la historia de YouTube. La letra de la canción parodia la vida en el barrio de Gangnam en Seúl (Corea del Sur), una zona exclusiva y lujosa que, tras la enorme fama que le ha proporcionado PSY, ha generado preocupaciones de los políticos locales por mantenerla en buen estado. Desgraciadamente, eso supone expulsar de allí a los vendedores locales, y los métodos que se emplean no resultan nada razonables.
Según leemos en 20minutos, las autoridades quieren que el barrio resulte modélico ante los turistas que lo visitan, y no permiten que se instalen puestos de venta ambulantes, a pesar de que resultan muy típicos en el país. Al parecer, se dan hasta tres avisos a los afectados para que abandonen la zona, después se envían matones que destrozan los puestos y agreden a sus dueños. Lo sorprendente es que esta forma de actuar resulta legal en el país. Los vendedores, ante la falta de otras perspectivas laborales, siguen acudiendo a la zona, y corriendo el riesgo de recibir una paliza por intentar ganarse la vida.
Los trabajadores de la zona querrían ver legalizada su actividad, y pagar impuestos en lugar de recibir multas constantes. Hubo un proyecto para hacerlo, pero se dejó aparcado, y la encargada del distrito se niega a negociar: al contrario, no hace más que presionar al colectivo. Menos mal que el siguiente vídeo de PSY alejó la atención del barrio, pero lo cierto es que el Gangnam Style no ha hecho ningún bien a estos surcoreanos. Desde luego, mantener una zona de una ciudad en buen estado para los turistas no justifica de ninguna forma acosar a personas que intentan trabajar honradamente.
¿Qué opinas del tema? ¿Crees que la culpa es de los insistentes vendedores, o que las medidas que se toman contra ellos resultan excesivas?