¿Qué cara pondrías si se te acercara un animal salvaje de 300 kilos de peso y que puede correr a 50 km/h? Yo me sentiría muy nervioso, pero Drew Hamilton decidió grabar un vídeo, parecido al del insecto más estúpido del mundo, pero con una criatura un poquito más grande. Leemos en Sploid que estaba admirando el paisaje en un parque natural de Alaska acompañado de un amigo, cuando este amistoso oso Kodiak se acercó a saludar. Sin duda, debieron vivir un momento de tensión, aunque el animal en ningún momento dio la más mínima muestra de agresividad. ¡Para que luego los osos tenga mala fama!
Como se enteren los chinos, en vez de pintar los perros de pandas, igual empiezan a peinarlos como osos pardos. ¡Sería muy curioso!