Cuando te dimos consejos para hacerse un selfie genial ya te advertimos de la importancia del entorno, pero nunca imaginamos que alguien se fuera a subir a un rascacielos para sacarse uno. Pues el fotógrafo Daniel Lau y sus amigos se han animado, como descubrimos en Sploid. Por si fuera poco, se ponen a comerse unos plátanos encaramados a un edificio de 346 metros de altura. La verdad es que con gente así no me extraña que los selfies lleguen a considerarse una enfermedad mental. Eso sí, estos chicos son muy atrevidos, yo no me subiría a un edificio para sacarme una foto ni loco.
¿Qué te parece este vídeo? ¿Una genialidad que muestra la vitalidad de los jóvenes, o más bien una enorme chorrada?