Las calificaciones que puede obtener una persona a lo largo de su vida académica dependen de una infinidad de factores genéticos y ambientales que de momento la ciencia no conoce en detalle. Sin embargo, con la ayuda de un gran número de gemelos y mellizos, investigadores británicos han podido explicar la importancia de los genes en la inteligencia y otras características que diferencian a los buenos de los malos estudiantes.
Este estudio de genética, realizado por miembros del King College de Londres, tiene el propósito de explicar la importancia de la herencia genética en los resultados académicos de los jóvenes. Para ello, se estudiaron las calificaciones de 6653 parejas de gemelos y mellizos nacidos entre el 1994 y 1996 en el Certificado General de Educación Secundaria, un examen que deben realizar los estudiantes británicos a los 16 años de edad.
El grupo de estudiantes estaba compuesto por gemelos homocigotos (que comparten el 100% de su patrimonio genético) y heterocigotos o mellizos (que comparten el 50% de su patrimonio genético). Puesto que los gemelos viven en un ambiente familiar y escolar similares, la influencia de los factores ambientales es prácticamente nula. Por lo tanto, las diferencias observadas en las calificaciones entre gemelos y mellizos deberían ser de origen genético.
Los resultados de esta investigación, publicados en la revista PNAS, muestran que las calificaciones de los jóvenes presentan una gran heredabilidad. Esto no significa que el calificación de un determinado alumno dependa más o menos de sus genes sino que las diferencias en las notas de una población, como los 13.000 estudiados, tienen un mayor o menos origen genético.
En esta investigación se observaron dos cosas distintas: la inteligencia y el logro educativo. Estudios anteriores habían demostrado que la inteligencia estaba fuertemente relacionada con los genes. Además, otros estudios también han mostrado que el logro académico es un rasgo con frecuencia heredado.
Sin embargo, la motivación real de este estudio era investigar el porqué de la alta heredabilidad en cuanto al logro académico. Para analizar este porqué, se tuvieron en cuenta distintas variables como la confianza en las capacidades personales, la personalidad, la salud general, el bienestar, la percepción que tienen sobre ellos mismos, así como los posibles problemas de conducta.
De este modo, se obtuvo que el 62% de las diferencias en las notas académicas son de origen genético, siendo la principal culpable la inteligencia. Aunque los otros factores unidos jugaban un papel incluso más importante que esta.
Con este estudio invitan a cambiar el modelo educativo para adaptar la educación a cada niño, ya que un aprendizaje personalizado sería la clave para el éxito de todos los alumnos.