Recientemente hemos comentado que la fecha de nacimiento afecta a la personalidad (y no, en Xombit no creemos en la astrología), pero parece que modificar los aspectos de nuestro carácter que no nos gustan resulta bastante más complicado de lo que puede parecer. Al menos cuando ya pasa una cierta edad. ¿Las personas no cambian una vez se hacen adultos? De acuerdo a Brian Little, profesor de la Universidad de Cambridge, a partir de los 30 años nuestra personalidad apenas varía, y nos comportaremos de forma muy parecida a los 40 y a los 90… ¡algo un poco desalentador!
Al parecer, durante la adolescencia y la juventud el carácter cambia mucho, pero luego se estabiliza. Leemos en Jezebel que estas afirmaciones se basan en estudios de la década de los ochenta realizados por William James, y confirmados por el trabajo de Paul T. Costa Jr. posteriormente. La personalidad se modifica poco más allá de los 30 y, además, en cualquier caso tiene un fuerte componente hereditario. Eso no quiere decir que a partir de ese momento no podamos cambiar, pero nos va a costar, y es muy difícil que las nuevas actitudes se integren en nuestra forma de ser como antes.
También es verdad que, alrededor de los 30 años, eventos como el matrimonio o la paternidad pueden afectar a nuestra manera de ver la vida. Pero parece que este cálculo es independiente de esos acontecimientos. Así que, si quieres volverte más sociable o empático, es mejor que te pongas a ello cuando antes, porque luego puede volverse demasiado tarde. En cualquier caso, ya hemos visto que la lengua que hablamos afecta también a nuestra personalidad, así que tal vez la solución sea aprender un nuevo idioma para descubrir nuevas actitudes frente a la vida.
¿Qué opinas de este tema? ¿Crees que uno puede cambiar si se esfuerza, o consideras que llega un punto en el que no es realista esperar modificaciones del carácter?
Imagen | Roger Braunstein