Empezar cualquier negocio en Internet requiere mucha constancia y dar la sensación de credibilidad, pero, aún así, los factores que harán que nuestra startup sea un éxito no terminan aquí. Las barreras de entrada de un negocio online son muy bajas, sin embargo, la mayoría de personas que empiezan este tipo de empresas, cometen errores que parecen obvios a simple vista, como sobreestimar beneficios o intentar ofrecer cosas que no puedes entregar a los clientes.
Es importante que, como startup, tengamos una clara definición de nuestros objetivos y hagamos todo lo posible para intentar dar una sensación de calidad al cliente. Los consumidores son muy importantes para nosotros, ya que de ello es de lo que se alimenta la empresa, por lo tanto, debemos cuidar hasta el mínimo detalle para conseguir que se lleven una buena impresión de nosotros.
A continuación os presentamos una lista de errores que muchas startups han cometido a la hora de empezar a trabajar de manera online, y que hemos visto gracias a Entrepreneur. Como hemos dicho antes, la mayoría son obvios, pero que si no los tenemos en cuenta pueden llevar al fracaso absoluto de nuestra empresa.
No tener un plan de ataque
No es necesario tener un plan de negocio formal para empezar cualquier empresa, pero aún así si que se necesita saber lo que queremos. Muchas personas ven los planes de negocio como deberes que no quieren hacer, pero lo cierto es que tener un plan puede ayudar mucho a la empresa.
Dicen que el plan de negocio en sí está obsoleto, ya que no necesitas un plan de 20 páginas escribiendo cada detalle de cómo la empresa va a actuar. Lo que sí que se necesita es saber quiénes son nuestros clientes, lo que estás vendiendo y la cantidad de dinero que las personas están dispuestas a pagar por tu producto o servicio.
Poner demasiada atención en pequeños detalles
El primer paso esencial para cualquier empresa es empezar a despegar mediante ventas y que las personas te conozcan, nada más. Aún así, hay muchos propietarios que se centran demasiado en pequeños detalles que no tienen tanta importancia al principio del ciclo de vida de la empresa.
Ejemplos de esto son muy comunes, y es que algunos directivos se centran tanto en como se ven las tarjetas de visita o el diseño del logotipo de empresa, que pierden tiempo que podría emplearse en otras tareas más importantes. Para evitar esto, debemos centrarnos en las actividades de la cadena de valor de la empresa, para entregar lo mejor que podamos a nuestro público, ya que eso es lo que nos mantendrá vivos.
No preocuparse por el dinero
Una empresa debe mantenerse optimista, pero el dinero es una excepción. Hay unas probabilidades muy altas de que nuestra empresa se quede sin dinero incluso antes de generar ingresos. Debemos saber cuanto tenemos para mantener el negocio, cuanto estamos gastando, y asegurarnos de tener un plan para conseguir más dinero antes de quedarnos sin.
La mayoría de propietarios intentan conseguir financiación cuando ya es demasiado tarde. Por el contrario, los fundadores deberían crear un plan financiero determinando en cómo y cuánto dinero se gastará y saber la manera que tienen de conseguir más financiación antes de que se termine.
Ignorar la atención al cliente
Al empezar un negocio online lo normal es que la mayoría de nuestras ventas se hagan mediante Internet, por lo que es bastante fácil olvidar que los consumidores son personas con una alta probabilidad de volver a comprar en nuestra página web si han conseguido una buena experiencia.
Debemos intentar asegurarnos que tenemos maneras de interactuar con las personas que visitan nuestra página para recibir su feedback y que se animen a volver a comprar en nuestra empresa. También podemos utilizar herramientas de control como Yelp y así saber quién no está contento con su experiencia.
Dar demasiado y no conseguir nada a cambio
Antes de conseguir credibilidad como empresa y hacer que la gente compre nuestros productos, podemos mirar de ofrecer muestras gratis para que la gente sepa lo que va a comprar en el futuro. Haciendo esto podemos crear un cliente que siempre acuda a nosotros, especialmente en aquellas startups que se dedican a ofrecer servicios.
Sin embargo, el coste de ofrecer productos gratis puede volverse en nuestra contra. Lo ideal sería ofrecer algo útil, con un coste no muy elevado al consumidor a cambio de su dirección de e-mail, como por ejemplo una receta, una guía o instrucciones para conseguir algo.
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Hasta aquí la lista de errores que cometen muchas startups al empezar su negocio en Internet. Como podéis observar, todos los errores tienen una solución bastante fácil, por lo que solo debemos estar atentos a lo que hacemos para no cometer estos fallos. Realmente, todo se soluciona teniendo una buena estructura planeada y prestando atención a todos los pasos que estamos haciendo para conseguir el éxito.
