Hace no muchos años, digamos que alrededor de 10, Amazon y Google se encontraban frente a frente en su lucha por lograr una buena infraestructura en la nube. Sin embargo, Google no supo bien qué hacer y canceló el rumoreado Google Disk, dándole una seria ventaja a sus competidores, quienes no se quedaron atrás y decidieron seguir dándolo todo.
Mientras Amazon tomó ventaja, logrando levantar un negocio multimillonario como lo es AWS, Google fue un espectador de cómo la tecnología en la nube crecía a un ritmo extraordinario y esperó desde más atrás al paso en falso, aprovechando la oportunidad propicia para volver los puntos favorables de Amazon en su contra. Algunos de los mayores roces entre las compañías se han vivido con luchas como las comparativas entre Google Play y Amazon Appstore, luchando por ser las mejores tiendas de apps.
Las nuevas tecnologías se han estado prediciendo gracias a distintas fases, las cuales de momento no han ido muy desviadas. En primer lugar nos encontramos el círculo de hype que se le provoca al público, aunque a veces puede ser un arma de doble filo, ya que si hacemos crecer mucho las expectativas y luego el producto final acaba decepcionando, es un grave problema. Ahí es donde aparece la segunda fase, en la cual podemos ver cómo se utiliza la tecnología de forma básica para demostrar que tiene una buena utilidad.
La tercera fase llega con los nuevos proyectos, tratando de construir lo que no se pudo hacer antes, incluyendo nuevas aplicaciones de dicha tecnología y nuevos métodos para llevarla a cabo. Actualmente, los clientes están satisfechos con el servicio AWS de Amazon, pero tratan de lograr más capacidades y opciones al programa para mejorar, donde destaca la intención de deshacerse de sus centros de datos para poder tener toda la información en la nube, buscando un rápido progreso.
Los próximos pasos y mirando al futuro
La nube ha puesto patas arriba el mercado de almacenamiento de la empresa, pero no es esta su ventaja competitiva, pues el almacenamiento local puede ser un gran rival debido a que el ancho de banda no es precisamente barato. El almacenamiento en la nube no tiene ningún centro de datos a escala empresarial con la capacidad de coordinar en pocos segundos una gran candidad de CPUs. Además, los CPUs son caros y solo se podrán usar mientras las principales marcas de la industria puedan mantenerlos al nivel.
Éste es el punto donde Google puede dar un golpe de efecto y ponerse en cabeza, pues Amazon se está centrando en elaborar una red de centros de datos en la nube que pueden hacerlos podersos en la actualidad, mientras ”La gran G” apuesta por un proyecto a largo plazo que permita a su servicio en la nube utilizar gran cantidad de potencia. Cierto es que Amazon también ha triunfado sobre Google gracias a proyectos similares, como el lanzamiento de YouTube Gaming para responder a Amazon y Twitch.
Un claro ejemplo de la ideología de Google lo encontramos con su servicio de traducción. La base de datos del programa puede tener un tamaño descomunal, pero han logrado que funcione de forma muy eficaz gracias a los recursos informáticos y algoritmos que lo hacen funcionar. Otro gran ejemplo llega con la nueva función que ha publicado Google recientemente, la cual permite determinar la localización de las fotos a partir de una red nerviosa, proyecto que comenzó con la increíble cifra de 126 millones de fotos geolocalizadas.
El modelo de negocio a partir de la nube que presenta Amazon triunfa porque la gente sabe cómo funciona y es el que más se usa, pero se estima que solo lo será durante la actual generación de aplicaciones. Según los usuarios van descubriendo nuevas funciones del uso de la nube, las estructuras de las aplicaciones líderes cambiarán y esto favorecerá a Microsoft y Google, quienes trabajan al máximo en desarrollar los sistemas informáticos. Además, esta última compañía está demostrando su intención por revolucionar el mercado con proyectos como usar drones para extender la red 5G de forma mundial. Mientras, podremos seguir disfrutando de dos grandes servicios pero… ¿Con cuál te quedas?
