Lucasfilm, la productora de George Lucas, continúa con su plan de producción que pretende lanzar varias películas de Star Wars durante los próximos años. La más reciente en este plan es Rogue One: A Star Wars Story, que tiene fijado su estreno para diciembre de este 2016. Sin embargo, parece que no todo va según lo deseado y Disney ha puesto algunas trabas al resultado final de este spin-off.
Page Six ha sido la web encargada de recoger las declaraciones de una fuente anónima, que afirma que el equipo de la película debe volver a reunirse en julio para rodar de nuevo un gran número de escenas. Disney se ha mostrado insatisfecha con el aspecto final de Rogue One: A Star Wars Story y ha obligado a grabar de nuevo para lograr el gran resultado que permitió a The Force Awakens convertirse en un éxito en la taquilla mundial.
Esta orden de Disney transmite malas sensaciones sobre el esperado spin-off. ¿Tan mal está Rogue One según los ejecutivos de la compañía? Al menos, por ahora, este nuevo rodaje no afectará en la fecha de lanzamiento de la película, programada para este diciembre, aunque ya vimos cómo Disney posponía sin ningún problema el estreno de Star Wars VIII para diciembre de 2017 para aprovechar la taquilla navideña.
Rogue One: A Star Wars ya lanzó un tráiler el pasado abril, del que ya puedes leer un breve análisis. Ahora, con esta grabación de un gran número de escenas adicionales, se espera que cambie en gran medida lo que podemos ver en este avance, aumentando también así el presupuesto dedicado al film.
Posteriormente, ha sido Hollywood Reporter el medio encargado de confirmar esta noticia, explicando que los responsables de Disney entendieron que la película tenía un tono muy serio para formar parte de la historia de Star Wars. Por ello es necesario un nuevo reshoot que implicará a gran parte del reparto protagonista junto al director Gareth Edwards.
El objetivo final de este nuevo rodaje es ”aligerar el tono, aportar más levedad a la historia y restaurar el sentido de la diversión de la saga”. Así, Disney pretende que Rogue One: A Star Wars Story coincida con el estilo que mantiene el universo de Star Wars desde 1977.