Nos encontramos en un momento en el que la tecnología avanza a pasos agigantados. A lo largo de estos últimos años hemos visto el ascenso exponencial, sobre todo del sector de la telefonía móvil en todos sus ámbitos.
Nuevas tecnologías, nuevos conceptos, nuevos materiales… En este caso hablaremos hoy de un nuevo nanomaterial desarrollado por las universidades de Illinois y Corea, que podría tener aplicaciones muy interesantes y quien sabe, puede que también revolucionar la tecnología.
¿Qué características tiene?
Este nuevo material, todavía sin un nombre propio, es prácticamente transparente, fino, flexible y altamente conductor de electricidad. Según consta en el estudio realizado, mantiene todas sus propiedades tras ser estirado y doblado numerosas veces.
Al igual que el grafeno, podría usarse para crear pantallas curvas y flexibles. Además de estas aplicaciones, podría utilizarse también para construir paneles solares más avanzados o incluso piel artificial. Quién sabe qué más usos podría tener este nanomaterial dadas sus propiedades.
El estudio fue publicado en la prestigiosa revista Advance Materials, que se dedica al estudio de nuevos materiales para cualquier ámbito tecnológico y que como este, tengan algo de especial o revolucionario.
¿Cómo se fabrica?
Fabricarlo ha supuesto mucho tiempo de investigación debido a las dificultades que se presentan al trabajar con este tipo de materiales. Hay que tener en cuenta que se está trabajando a nivel de nanomaterial y esto nunca es fácil.
Para producirlo, en forma de una fina película, se comienza con una estera de nanofibras de poliacrilonitrilo, o PAN. Este material posee un diámetro igual a la centésima parte del diámetro de un cabello humano. Tras este paso, el nanomaterial presenta un patrón parecido al de un panal de abejas.
Además, después de todo ello, todavía no sería conductor, por lo que es necesario bañarlo en metales como la plata, el cobre o el oro. Tras esto, adquiriría una muy alta capacidad de conducción eléctrica.
¿Cuál será su futuro?
Siendo un descubrimiento tan reciente, está claro que aún falta mucho trabajo por parte de los técnicos e investigadores. Sin embargo, es muy posible que no pase mucho tiempo hasta que volvamos a escuchar o leer algo sobre este material, ya que sus aplicaciones pueden ser muchas.
Habrá que esperar un tiempo para ver cuáles de ellas se llevan de verdad a la práctica y si de verdad, merece la pena que las grandes empresas inviertan en esta nueva tecnología.
