Ayer Samsung volvió a revolucionar el panorama de Android, aunque lo cierto es que cada vez hay menos margen para grandes sorpresas en un momento en el que todos los terminales tope de gama rayan a un nivel altísimo en la mayoría de los apartados (si excluimos la siempre controvertida duración de la batería). Pero el Samsung Galaxy S 4 está llamado a ser el terminal insignia del ecosistema Android, incluso por encima del Google Nexus 4. Que estamos ante una máquina sobresaliente que entusiasmará a los amantes de la tecnología y a todos los que les gusta estar a la última me parece indudable, pero… ¿realmente vale la pena para un usuario medio?
Echemos un ojo a sus especificaciones: pantalla de 5 pulgadas a 1080p. Mi terminal monta una pantalla de 4,7 pulgadas que considero demasiado amplia (y tengo las manos grandes) y es increíblemente nítida a pesar de quedarse en 720p. ¿Cámara de 13 megapíxeles? ¿No sería mejor ofrecer más calidad de imagen como el HTC One en vez de alcanzar resoluciones absurdas? Respecto al procesador de ocho núcleos, me inclino a pensar que es una innecesaria maniobra de marketing, aunque habrá que esperar a que los expertos valoren si representa una ventaja sobre los de cuatro, que en general están rindiendo muy bien.
El resultado es el que ya comenté hace tiempo: no es buena idea adquirir un Android de gama alta, el comprador medio estaría haciendo un gasto innecesario. ¿Significa eso que que el Samsung Galaxy S 4 no tiene razón de existir? Al contrario, hay un sector entusiasta que exige este tipo de productos, aún siendo conscientes de que no ofrecen la mejor relación calidad-precio. Además, para la marca disponer de un terminal estrella representa una publicidad inmejorable, y muchos consumidores asocian el éxito de los modelos superiores a toda la gama.
Y para eso Samsung tiene un amplio catálogo en el que cada usuario puede encontrar una alternativa que se adapte a sus necesidades. Pero, no nos engañemos, a todos nos gusta disponer de lo mejor de los mejor si nos lo podemos permitir, y por eso el Samsung Galaxy S 4 se va a convertir en un súper ventas seguro. Puede que no se trata de la elección ideal para todos sus compradores, y quizá represente un dispendio innecesario para muchos, pero los seres humanos somos así, y nos dejamos seducir por objetos extraordinarios como el que nos ocupa. Así que la decisión queda ahora en tus manos.
¿Te comprarías un Samsung Galaxy S 4? ¿Crees que se adapta a tus necesidades, o que resulta excesivo para el uso que le das a un teléfono móvil?
Ibas a hacer una reseña o una platica de vecinas?? Por lo que es tu análisis de tendedero se queda muy corto. Informate!
Para nada pretende ser una reseña, sólo es un artículo de opinión sobre un tema que me pareció interesante :-P.